Capitulo 3

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Un hombre que me pareció muy cómico, lindo, baja estatura y ropa extraña, pida deducir que era un eunuco, nos compro , dijo que se llama Sumbul aghä y que nos iba a presentar a la madre Sultana, ella escogería a una de nosotras para servirle y las demás irán al Harem.

También dijo que la que tena suerte y sea elogiada por su majestad la madre Sultana tendría una gran vida en palacio ser su protegida solo teníamos que ser leales.

También que estamos en el palacio del sultán Ahmed subió hace uno meses al t trono y que a ellas nos habían traído como regalos.

Una médica nos revisaría a todas, si no éramos puras trabajaríamos en el harem para el resto de nuestras vidas, se estaban enferma serían expulsados del Palacio.

Nos explico algunas reglas del Harem, como diferenciar a las Sultanas, hermanas, tías, del sultán, también nos habló del patio de las favoritas.

— Opps ganaré el corazón del sultán, seré madre del príncipe heredero. — dijo una tipa random.

La mire tipo ¿Y esta loca? Sumbul la miró con burla, el sultán ya tenía a una favorita, nurbahar Hatun, pero que nosotras teníamos oportunidad tambien.

¡¡atención la reina madre Aysel sultán!!

Rápidamente hice una reverencia, las demás me miraron extraño y Su mbul con aprobación

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Rápidamente hice una reverencia, las demás me miraron extraño y Su mbul con aprobación.

— Hagan reverencia..— susurra Sumbul

Todas imitaron mi acción.

Una mujer muy hermosa y muy joven también, su cabello pelirrojo le daba un toque especial y la hacia brillar ante todos, caminaba con un porte elegante pero fuerte, quedé embobada, sus pasos eran fuertes y Amenazaste.

Se acercó a todas nosotras, nos miro, frunció el ceño y observo a Sumbul.

— Llévalas a los baños Sumbul, revísenlas, y dale ropas cómoda, luego súbelas a mis aposentos.

Aysel sultán, había leído sobre ella, la describían como una mujer hermosa pero realmente no le hacen justicia los escritos.

— Por supuesto madre sultana. — dice bajando la cabeza con una sonrisa.

Me pilló observándola, levantó unas de los cejas y hizo lo que llamamos un "puchero" en tono de burla, baje la cabeza rápidamente Asustada.

La escuché reír, también la describieron como una mujer alegre, bromista, pero peligrosa.

Siguió su camino, y el Agha nos entrego a firial kalfa, y ella nos llevó a los baños, una doctora no esperaba. 

Fue realmente humillante, en mi vida me había sentido tan avergonzada en mi vida, me separaron con las vírgenes.

Habían grupos de las no puras, las enfermas y las puras.

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La Sultana Güyçli Aysun Donde viven las historias. Descúbrelo ahora