El sultán ya no pasaba tanto tiempo con melek, en el harem se había corrido un rumor, que el sultán mantenía una relación con una señorita del harem, pero que la han mantenido oculta.
Entre eso y muchas otras cosas, Melek ya tiene 3 meses de embarazo y estaba insoportable y más ahora que el sultán la veía 1 vez a la semana, para saber sobre su embarazo.
El jardín secreto se había convertido en nuestro nido de amistad, estos tres meses nos habíamos acercado mucho más me reunía con el casi todas las tardes.
La madre Sultana estaba estérica buscando a la causante de tal alboroto en el harem, y la tenía cerca, solo que había decidido no decirlo para que no me usen en sus planes contra Melek.
Lilith sabía, porque una vez me descubrió caminando por los pasillos, y tuve que contarle mi secreto, estaba como loca, chillo de felicidad.
- ¿Y qué harás Melek? Ahora que otra te ha quitado la atención de su majestad. - pregunta una de las chicas
Me encontraba cerca de un grupo de chicas que rodeaban a Melek.
- Esa rata Cobarde, se ha mantenido en las sombras, pero esto no le durará mucho tiempo, cuando dé a luz, el sultán volverá a mí. - dice la mujer entre dientes
- ¿Estás segura? ¿Y si el sultán ya no te busca?
- Lo hará, a diferencia de ustedes el me ama, yo le daré su primer hijo, seré la Sultana de este palacio.
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Puse los ojos en blanco, Y junte mis manos, Lilith entro al Harem por su sonrisa traía buenas noticias con ella, se sienta junto a mí.
- El sultán te ha enviado esto. - Susurra en mi oído
Debajo de las telas de su vestido, saca una carta sin sello, con cuidado la tomé y la coloqué debajo de mi vestido.
Miré hacia los lados, topándome con la mirada curiosa de Sumbul, sonreí nerviosa, y él me miro serio.
- Bueno ¿Que harás?
- No lo sé Lilith
- Todos te buscan, la Sultana Mariam está como loca buscando a la mujer que tiene el corazón de su hermano.
- Solo somos amigos Lilith. - dije ocultando mi sonrisa.
- Si claro, amigos que se dedican poemas y se encuentran en secreto.
La mire mal y ella sonrió inocente.
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