Die Alone

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25 de julio 2014.

Estaba terminando una tarea, es viernes y quiero tener el fin de semana libre para poder salir con Nath y Silvi, mi papá me dijo que este fin de semana no necesita de mi ayuda en la empresa, termine mi tarea, guarde mis cuadernos y mi computador, baje a la cocina por chocolate y galletas de fibra con mantequilla de maní, me prepare un emparedado de queso y volví a subir a mi habitación, mis padres no están en casa, salieron a cenar solos, ellos suelen hacer eso. Coloque algo de música y me puse a comer.

Un ruido proveniente de mi ventana llama mi atención.

— Pss... Pssss.

Seguro mis padres olvidaron sus llaves, ellos tienen suerte de que este despierta aún.
Abro la cortina de mi balcón y casi me da un infarto del miedo cuando veo a una persona en mi balcón. Me toma unos segundos darme cuenta de quién se trata.

— Martín! ¿Qué haces aquí?

— Quería agradecerte por lo de hoy, en verdad gracias Urulet, es importante para mi.

— Martín no tienes nada que agradecer. - abro la puerta del balcón. —Pero dime, ¿Qué haces aquí a esta hora?

— Vine por sexo. - Dice muy seguro

— MARTÍN VARGAS!!!!

— ____deberías de haber visto tu cara. - dice mientras se ríe de mí. —Pero no, no vine por eso, no aun.

—MARTÍN!!. - Martín solo se ríe.

—No Urulet, vine por que estaba por dormir, y cuando estaba en la cama y vi hacia la ventana vi las estrellas y sentí la necesidad de venir a vete y verla juntos.

— Martín eres tan lindo. - lo abrazo rodeando mis manos por su cuello. -—¿Quieres pasar? Hace frío aquí afuera.

— No, no es correcto, tus padres no están y se puede mal interpretar que yo esté en tu habitación.

Martín es tan perfecto, no puedo creer que tarde tanto tiempo para darme cuenta, él no es para nada la persona que yo pensé, en estos meses él me ha demostrado lo increíble que es, me arrepiento de todas las veces que me porte mal con él, estoy lista para dar el siguiente paso con él, en unos días, en nuestra fiesta de graduación voy a decirle que acepto todo con él, acepto que tengamos oficialmente una relación de novios, de poder decirle a todos que estamos oficialmente juntos.

Saque una cobija grande y dos almohadas, las acomode en el piso, Martín me ayudo y nos sentamos a ver las estrellas juntos.

— Te quiero Marto. - beso su mejilla, y me acerca más a él y me hace una seña para sentarme entre sus piernas y recuesto mi espalda en su pecho.

— Igual te quiero ______.

20 de diciembre de 2026

Nunca es una sensación buena cuando te despiertas con el cuerpo pesado , como si un camión de 10 toneladas hubiera pasado sobre ti . Y peor , cuando pareces oír una voz al fondo que te dice que algo está mal , ó está a punto de suceder .

Nunca sabes que va a pasar , o ha pasado , quien fue o con quien será . La sensación de impotencia es terrible , y provoca paranoia .

Ayer por la noche después de enterarme de todo lo que Martín me dijo , sentí una carga pesada de sentimientos . La culpa sobre todo incluso si no recuerdo haber hecho estas cosas . Me convertí en una persona horrible , tal vez sucedieron más cosas que Martín no me dijo . ¿ Y honestamente ? Prefiero no saber nada más , ayer fue pésimo y ver a Martín llorar después de contar todo , consiguió ser peor . Él estaba frágil , por mi culpa .

Acuérdate de mí Donde viven las historias. Descúbrelo ahora