Recuerdos de Nada

19- Lío familiar

Ranma y Shampoo con sólo la ayuda de la foto de esas dos jóvenes estaban lidiando con una completa locura al mejor estilo de Sir Arthur Conan Doyle con las aventuras de Sherlock Holmes. Bajo una leve llovizna él, ahora siendo la pelirroja, y la amazona que estaba cubriéndose con un paraguas llegaron al muelle pero este era el equivocado, pues en donde estaban las dos desaparecidas.

No en balde, y viéndose en la situación en la que estaban decidieron acercarse a una cafetería de la mochila quen ahora era llevaba Shampoo y que fue un regalo de Navidad de parte de Kasumi, sacó un termo con agua caliente y la vertió en Ranma para volverlo a su forma masculina.

—Si yo fuera Shinobu — el chico dijo musitando —¿en dónde me escondería?

—Sólo tenemos esta fotografía —murmuró Shampoo sacando la imagen —se supone que esta fue tomada en cercanías del muelle.

—Espera un segundo — Ranma le quitó la foto para observar más detalle.

Ranma examinó cada detalle de la fotografía, esa imagen detallaba un estacionamiento y se veía perfectamente la matrícula de un automóvil de la marca BMW, la misma que Shinobu llevaba. Cuando dejó de lloviznar, y el chocolate también se acabó, el chico al fin sacó una conclusión. El cambio era evidente, mientras el viejo Ranma era más impulsivo y directo este nuevo Ranma era más cauto y observador.

—Estamos en el muelle equivocado — agregó.

A la amazona se le abrieron los ojos por ello, ella tomó la fotografía que tenía su amigo; y sí que tenía razón ya que no había un solo estacionamiento cerca a ese lugar y el más cercano era en el puerto a donde llegaban y dejaban los dueños de barcos sus vehículos marítimos.

—Si logramos encontrar el auto de Shinobu

—Encontraremos a Ukyo.

—¿Qué le pasó a Ukyo? — preguntó alguien desde atrás.

Ambos giraron su cabeza para encontrarse con Akane y Ryoga, ambos estaban tomados de las manos como si estuvieran en algún tipo de cita romántica; a Ranma le pareció curioso ver a esos dos en el muelle y más con una sombrilla que siempre cargaba el trotamundos. El Saotome invitó a sentarse a los dos para hablar de lo sucedido con Ukyo. Entre el sonido de las olas del mar y de varios barcos cercanos a la bahía las palabras fluían como un río en mitad de un cañón.

—Entonces están perdidas hace dos días — Ryoga murmuró —y las únicas pistas que tienen son que estuvieron aquí y en el muelle de por allá — señaló en la dirección opuesta —no quiero pensar mal pero siento que están escondidas.

—Ryoga — Akane lo corrigió —es por allá — señaló hacia la playa.

—De todas maneras — Ranma tomó la palabra —¿por qué estarían ocultas?

—Kasumi y Ryoga me dijeron algo en nuestro viaje a esquiar — la Tendo comentó —Ryoga piensa que Shinobu no debía darte algo si no eres de su familia. Además se ve bastante pero bastante parecida a tu madre.

Ranma palideció y su mirada cambió de serenidad a una de total confusión, la insinuación de Akane de que Shinobu era parte de su familia por el gran parecido a Nodoka no pasaba desapercibido por nadie; y más aún Shampoo debía estar conmocionada ya que de cierta manera esa chica albina era, en cierta medida, parte de la familia del de la trenza.

—¿Qué tonterías estás diciendo, Akane? — preguntó Ranma -pero me gustaría averiguarlo.

—Vi a Shinobu quitarle algo de la cabeza a Ranma — Shampoo dijo musitando.

—¿En serio? —Akane la miró —por cierto ¿cómo sigues de tu herida en la cara?

—Ya mejor — la amazona suspiró relajada.