Vivir de chocolate, wattpad y problemas
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Marian Lemes Oliveira
"Cantas de puta madre"
"Mi sueño es ir a Sunfil para conocerte y escucharte cantar en vivo"
"Eres perfectaaaa"
"Graba un video cantando el mismo aire porfaaa"
Mientras esperaba a que mis amigos llegaran a la heladería Sunice, me entretenía leyendo los comentarios en mis videos de TikTok e instagram. Aunque me encantaba cantar en el bar Cavolík.
No me acostumbraba a los halagos y a la atención.
No sabía cómo recibirlos.
Me daba ganas de decir que yo no era todo lo que decían.
Si supieran que había presenciado dos muertes ¿seguirán admirándome? Porque yo me odiaba por no hacer nada al respecto. Mi cabeza dolía siempre que pensaba en Bernardo; y el miedo de contarlo a la policía y que los hermanos Devley hiciera daño a mi mamá y a mis amigos no me permitía tomar una actitud .
No tenía duda de que Adrian cumpliría sus amenazas. Pude verlo en sus ojos. Él mataría a mi mamá, a Lara y a Keven.
Me culpaba por agradarme ser acogida por las personas, y que ellas notaran en mí cualidades y talentos que me costaban ver.
Y tal vez disfrutaría más de los halagos si el recuerdo del hombre atado con una cuerda sobre el bidón de ácido no me quitara el sueño. El peso de haber elegido el color amarillo no me dejaba dormir; y a la vez, la seguridade de saber que Will no volvería a abusar de nadie más me decía que había elegido el color correcto.
Ahora tenía certeza de que mi padre no volvería y estaba segura de que SDP llegaría a su fin. No me agradaba ser cómplice de Alan y Adrian, pero me agradaba menos que Sunfil fuera sinónimo de infierno para las personas como mi mamá que fueron engañadas y tuvieron sus sueños asesinados.
A veces me daban ganas de encerrarme en mi cuarto con una reserva infinita de chocolate y pasarme los siguientes años leyendo Wattpad y emborrachándome de azúcar, así evitaría la triste realidad.
—Yo toy puesto pa ti y tú te me quita... —la canturia desafinada de Víctor me sacó de mi reflexión. Sonaba Neverita de Bad Bunny a todo volumen en la bocina.
Decidí acompañarlo, para alejar los recuerdos y cantamos al unísono:
—Diablo que piquite la chamaquita. El corazón lo puso en la neverita, Dice que este verano se queda solita, pero nunca sola, sola. Amores vienen y van, como las ola'.... —levantamos los brazos y comenzamos a moverlos para simular las olas—. El DM explotao', to's le escriben hola, Una fila 'e cabrone' y yo quiero la cola.
—Ya veo que Víctor te ha intoxicado con Bad Bunny, eh.
El pelirrojo se sentó en la silla delante de mí.
—Me gusta Bad Bunny.
Él suspiró y negó con la cabeza.
—Hay locos para todo en ese mundo.
—Dijo el que es adicto a podcasts y dibujos animados.
—Mejor pidamos un helado, así te ocupas la boca y dejas de hablar mierdas. —La sonrisa estampada en sus labios que le hacía brillar sus ojos avellanas me aliviaba el corazón, a los pocos, Keven, volvía a su humor normal.
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Yo, mi profesor y el asesino [+18] ✔️BORRADOR
Misterio / SuspensoUna noche es suficiente para destruir una vida, un beso es suficiente para obsesionarse. La búsqueda por el amor y la aceptación puede ser dolorosa y lenta, pero la llegada del desconocido a Sunfil apresuran las cosas para Marian y sus amigos, sin...