Extra (+18)

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Cuatro años y meses después. ✨

_Jungkook ya terminaste_ habló un ahora castaño.

_Ya voy amor, Ha-neul no me deja salir_ dijo un pelinegro de cabello un poco largo.

Jimin entró a la habitación y divizo que su hija tenía tomada la mano de Jungkook sin querer soltarla, se acercó y la levantó modo princesa.
_ Porque no quieres dejar salir a tu padre_ con voz cariñosa.

_Me dijo que me daría dulces y no cumplió_ hizo un puchero. _Tu si cumples por eso a ti te dejo salir_ le abrazo por el cuello.

Jimin sonrió por lo bajo y volvió a ver a Jungkook. _Por qué no has cumplido cariño_ hizo un gesto.

_Le dije que se los traería cuando volviera pero no me escucha_ se acercó.

_ Amor ya escuchaste a tu padre verdad, ahora confía en él, ve a jugar con Yoongi para que nosotros podamos ir a traer a tu hermano de la casa de tu abuela si_ dijo acariciando su cabellera negra.

Ha-neul hizo un puchero pero dejó un beso en su mejilla. _Está bien, los quiero_ tendió su brasito para que Jungkook se acercara y poder abrazarlos a ambos, después darles un beso en la mejilla de cada uno.

_eres un diablillo_ habló Jungkook y le beso su mejilla.

_Papá_ hizo mala cara la niña y volvió a ver a jimin es busca de ayuda.

_ Jungkook_ habló jimin con una sonrisa.

Jungkook también sonrió y bajó a la niña de los brazos de jimin para llevarla donde Yoongi estaba muriendo de risa por la escena tan tierna. _Cuidala mucho, vendremos en unas horas_ dijo caminando hacia él.

_Papá puedo caminar_ le sonrió.

_Ven con tu tío cariño_ habló Yoongi y la atrajo a él para luego acomodar los juguetes.

Jimin sonrió y se despidió con su mano alsada al igual que Jungkook.
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Entraron al coche y Jimin sonrió al acomodarse en el asiento.

_ amor de que te ríes_ sonrió Jungkook al ver a jimin.

_ por qué nunca le compras lo que les prometes, por eso los niños ya no te creen_ sonrió.

_Si les cumplo, pero ellos solo se acuerdan cuando se me olvida_ dijo suave.

_Amor, el problema es que tu les dices que si a todo lo que ellos te piden_ sonrió. _ y de tantas cosas, se te escapan las que ellos se acuerdan_ volvió a sonreír.

_Cómo hago para saber cuáles son las cosas de las que ellos se acordarán_ le da una breve mirada atento.

Jimin volvió a reír y tomó la mano de su esposo que yacía en el freno. _No es esa la opción_ acarició su mano.

_Cuál es entonces_ dijo atento.

_No lo sé en realidad_ sonrió. _Lo bueno que a mí no me piden tantas cosas como las que te piden a ti, yo creo que les gusta molestarte_

El peor errorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora