Capítulo 6

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Cenar y dormir


- Es solo por unos días, hasta que pueda resolver mi situación con NamJoon, por favor- el rubio estaba a punto de arrodillarse, suplicando a TaeHyung que lo dejara quedarse en su casa, el cuál seguía negándose.

- Ya te he dicho que no- el pelinegro caminó hasta el salón y se sentó sobre el sofá- Sí NamJoon le llegara a preguntar a YoonGi sí te estás quedando en su casa y descubre que no es así- miró atento como el rubio tomaba asiento a su lado- Puede comenzar a sospechar cosas, y eso no es conveniente.

SeokJin volteó los ojos- Hablaré con YoonGi y le pediré que diga una pequeña mentira por mi, no tienes de qué preocuparte- intentó tranquilizar las malas ideas del pelinegro, sabía que el pálido probablemente no lo iba a encubrir, pero eso no tenía por qué saberlo TaeHyung- Por favor, solo deja que me quede, prometo comportarme- insistió una vez más, esperanzado por una respuesta afirmativa.

TaeHyung lo miró a los ojos, conectando sus miradas- Ni siquiera traes ropa- pronunció en un susurro, no queriendo aceptar la locura del rubio.

- Le pediré a Jeon que me aliste una maleta y me la dé esta noche- buscaba todo tipo de solución ante las excusas y problemas que exponía TaeHyung.

El pelinegro se mordió el labio inferior, bajo la mirada y suspiró rendido- Está bien, puedes quedarte.

Una sonrisa enorme se dibujó en el rostro de SeokJin al oír las palabras afirmativas de su pequeño pelinegro, se abalanzó contra él y comenzó a repartir un montón de besos por todo su rostro, riendo al escuchar las quejas de TaeHyung y agradeciendo cada vez que podía por dejarlo quedarse en su casa.

El pelinegro no estaba muy contento con la situación, nuevamente el peligro acechaba su puerta y eso ponía en riesgo los sentimientos de una tercera persona.

•••

La puerta de su habitación fue tocada por quinta vez en tres horas, suspiró frustrado, ya no sabía de qué manera alejar a la cocinera, no quería bajar, no quería cenar y no quería conversar con absolutamente nadie.

- Señora Yang, estoy cansado de decirle que no quiero cenar- se sentó sobre la cama y llevó sus manos a rostro- Coma usted y luego váyase a dormir- terminó de decir, encendiendo la lámpara que se encontraba en su mesa de noche, hace una hora que intentaba dormir y aún no podía lograrlo.

- No soy la señora Yang- pronunció una voz masculina desde el otro lado de la puerta, NamJoon saltó en su lugar al oír aquella voz tan grave- ¿Podría abrirme la puerta, señor Kim?

El castaño arrugó la expresión, confundido ante la petición del mayordomo- ¿Y eso para qué?- preguntó, curioso por la respuesta.

- El señor Kim me pidió que le preparara una maleta para los días que se quedará fuera- habló calmado, apoyado sobre la pared, ya un poco agotado de todas las tareas que había estado haciendo durante el día, su cuerpo le pedía a gritos un descanso.

NamJoon se cruzó de brazos, molesto ante la noticia que le dió el pelinegro, él en el fondo esperaba que SeokJin volviera a la casa, se disculpara y comenzara a hacer las cosas bien, que volvieran a la vida que tenían antes, donde despertaban juntos cada mañana, salían a dar paseos los fines de semana, se daban amor mutuamente y comían juntos siempre, no a esta mierda de vida que ahora tenían, dónde casi ni se hablan y al castaño le da asco y rabia cada vez que el rubio intentaba tocarlo.

Butler  |KookNam|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora