𝐀𝐍𝐀 𝐏𝐎𝐓𝐓𝐄𝐑 - 𝐂𝐄𝐃𝐑𝐈𝐂 𝐃𝐈𝐆𝐆𝐎𝐑𝐘

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝟗

─Bueno se aguantará, ahora eres una Gryffindor, espere nueve años para escuchar eso, estoy... ¡emocionada!

Negue mientras me terminaba el té.

─Debí decir Hufflepuff, pero dije Gryffindor.

─¿Por Harry? ─sabía que no se molestaría por lo que había dicho. Eso era lo que me gustaba de ella, no me justaba sin saber toda la historia.

Suspire larga y pesadamente. ─ Está molesto conmigo. ¡Lo peor es que yo debería estar molesta con él! No él conmigo.

─¿Por qué? ¿Qué paso?

Entonces le conté lo que había pasado con Harry y Cho en el tren.

─Y para rematar me encontré a Diggory coqueteando con Cho.

─Y, ¿eso que tiene que ver con Harry? ─dijo con una ceja alzada.

─Esto tiene que ver con Cho, ella... siento que algún día nos atacará por la espalda, me da mala espina.

Minerva solo se empezó a reír. Hace tiempo que no hablaban tanto, Minerva conocía a Ana más que otras personas.

─Quiero que seas prefecta. ─dijo de la nada Minerva a lo que ella fruncí el ceño.

─Me falta un año.

─Ya lo hable con Albus, te dejaremos que seas prefecta desde cuarto. ─iba a reprochar pero ella continuo─ Tu conoces cada rincón de este colegio así que si alguien sale de sus camas por las noches, tú lo sabrás.

Negué.

─¿Por qué?

─No soy niñera ─levante una ceja igual que ella─. Minerva... sabes que no me gusta cuidar a las personas.

─No te gusta, pero lo haces, es tu naturaleza Ana, siempre proteges a las personas, así les tengas rencor.

Recordé a Diggory y de seguro ella también lo recordó.

─Perdóname Minerva, pero no lo hare, prefiero dormir que estar cuidando niños que se escapan por las noches a quien sabe qué hacer, gracias por el té. 

─Menos 500 puntos para Gryffindor. ─escucho una voz grave.

─¿Por qué? ─alzo la voz porque aparte de que todo estaba oscuro no veía a la persona que le había bajado puntos a su casa.

─Shh ─pusieron un dedo en mi boca─, Estoy bromeando.

Como seguía sin ver agarre su brazo, calculo donde estaba su cara y empezó a trazar su cara, fue a su cabello y encontró rulos. Sabía que era él, lo reconoció por el aroma.

─Percy.

─Bingo. ─los dos rieron bajito─ ¿No hubiera sido más fácil prender luz con tu varita?

En ese momento apareció una luz que no era de Percy y tampoco mía, los dos volteamos asustados y miramos al responsable del hechizo y me relaje, pero Percy se tensó más.

─10 puntos menos para Gryffindor.

Al escuchar eso rápidamente Percy se alejó de mí y yo me quede en mi lugar mirando a Snape con los ojos entrecerrados por la luz brillante.

─Lo siento profesor Snape, no volverá a pasar, dejare a Ana en su cam-¡no! En la sala- digo la lleva-

─No se preocupe... Sr. Weasley, le recuerdo que usted ya no es prefecto en este colegio.

─Disculpe. Me estaba dirigiendo a la oficina del director Dumbledore, con permiso. Lo siento, nos vemos luego. ─lo último me lo dijo a mí a lo que me despedí con la mano.