One Shots - Joseph Quinn/Eddie Munson.

Básquetbol - Joseph Quinn.

—Y bien, ¿listos para verme en el partido de Basquetbol? —preguntó Joseph con una sonrisa.

—Claro. —sonreí.

—Iré a ver solamente porque quiero verte hacer el ridículo. —contestó Wesley tomando un sorbo de agua.

—Cállate. —le tiro un pedazo de fruta.

—Lo hará bien. —mentí con una sonrisa.

Joseph no es el mejor en básquetbol, mejor dicho no lo es, no sabe jugar, pero lo intenta y está bien.

Llegó la noche, con Wesley y Joe estábamos en la banca de la primera fila esperando que el entrenador le dijera a Joseph que entrara.

—Mírenlos, se creen mejor que nosotros. —dijo entrecerrando sus ojos.

—Porque lo son, Joe. —rode mis ojos.

—Si, lo son. —dijo Wesley mirándolos— si lo son. —repitió.

—¡Entrenador! —gritó Joseph captando la atención de el entrenador— El campo del Alero esta solo ¿puedo entrar?

—Entra, Quinn. —dijo el entrenador

—Cariño, te amo, pero dejémosle ese campo a alguien que si sepa jugar y sea un poco más alto. —acaricie su brazo.

—Oye, te gano en la altura. —me miro con el ceño fruncido.

—Estoy de acuerdo con Lily. —contestó Wesley.

—Mejor aprendan del maestro. —sonrió entrando a la cancha.

—¡Uh! —grite— ¡Vamos tú puedes! —grite poniendo mis dos maños al rededor de mi boca.

—No puede. —contestó Wesley y yo solamente asentí.

—Grabaré esto para enseñárselo a mis futuros sobrinos. —dijo sacando su celular.

—Wesley no les mostraras a su papá haciendo el ridículo. —golpee suavemente su brazo.

—Oh, si lo haré. —sonrió para empezar a grabar.

Vi como el escolta le pasó el balón a Joe, y él la dejó ir.

—Mierda. —susurre cuando Wesley soltó una pequeña carcajada.

Era el momento de Joe para poder echar una canasta y hacer que Wesley deje de burlarse de él por el resto de su vida, pero al parecer el universo no está de su lado. Llegando al área de tropezó haciendo que sus codos queden apoyados en el suelo.

—Cariño... —hice una mueca de dolor al mirarlo.

—Esto es maravilloso. —dijo Wesley riéndose.

—¡Quinn! —el entrenador lo regaño.

—Este video irá a la carpeta llamada «Joseph Quinn haciendo el ridículo». —dijo bajando su celular.

Joseph salió de la cancha, con un poco de dificultad para caminar.

—¿Estuvo buena la caída? —preguntó Wesley.

—Cállate. —se acercó a mi.

—¿Estás bien? —pregunte.

—Mis brazos duelen. —hice una mueca de dolor— auch.

—Séptimo video de Joseph siendo inútil.

—Cierra la boca Wesley, sino quieres que publique un video tuyo golpeándote en la portería.

—Súbelo y yo subo este. —sonrió.

—Idiota. —susurro y se se acercó a mi para besarme.