Mentiras - Eddie Munson

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Parte 1

—¿Ya vieron la ropa de la huérfana? —preguntó una chica del grupo de animadoras.

Ruby bajó su mirada intentando no voltear a verlas, mientras pasaba al lado con su bandeja de almuerzo.

—Deberían dejarla. —escuchó la voz de otra animadora.

—Chrissy, no seas aburrida, no esta bien vestida.

Solo ignoro sus palabras y se sentó en una de las mesas que estaba ahí. Empezó a comer cuando sintió una mano que tocó su hombro.

—Ruby, ¿sigue pendiente lo de la noche? —preguntó el líder de Hellfire.

—Si claro.

—Pasó por ti, ¿tu madre no tendrá ningún problema? —preguntó y ella negó.

—No lo creo. —contestó

Sabía que su madre si tendría un problema, pero no le diría la verdad a Eddie, no le convenía. Igual ya había encontrado la manera de escapar sin que su madre se diera cuenta.

—Bien. Buen provecho. —dijo y regresó a su mesa.

Ella dio un suspiro preguntándose si estaba bien lo que haría en la noche, puede que esto de un cambio drástico a su vida.

En la noche.

Llevaba los zapatos en su mano, iba bajando escalón por escalón, sin intentar hacer mucho ruido. Salió de su casa y se puso sus zapatos. Se acercó a la furgoneta, vio que Eddie tenía un porro en su mano la cual estaba afuera de la ventana, mientras expulsaba el humo.

—Hola. —dijo.

Eddie acercó su brazo para abrir la puerta.

—Entra.

—Gracias.

Ruby entro a la furgoneta y Eddie tiro su porro en la calle. Eddie empezó a manejar hacia el parque de remolques, pero la velocidad a la que iban Ruby estaba segura de que no era la apropiada.

Llegaron y Eddie abrió la puerta para que Ruby salga de la furgoneta, entregándole su mano.

Entraron al remolque de Eddie.

—Puedes sentarte, perdona el desorden. —dijo.

—No te preocupes. —ella se sentó en sofa mientras inspeccionaba el lugar— ¿vives tú solo?

—No, vivo con mi tío, pero cubre algunas horas extras. —dijo él. Ella solo asintió y bajo su mirada, no sentía mucha confianza.

—¿Y esto cómo es? —preguntó.

—¿A que te refieres? —se acercó a ella.

—¿Me drogo y ya?

—No funciona así, linda. —dijo sentándose a su lado— ¿en serio quieres hacerlo?

—¿Por qué no?

—Arruinarías tu vida, dudo que quieras eso. ¿Por qué lo quieres hacer? Si quieres decírmelo, claro.

One Shots - Joseph Quinn/Eddie Munson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora