One Shots - Joseph Quinn/Eddie Munson.

Bad Idea, Right? - Eddie Munson

Aviso desde el principio que es +18.

Ponía el labial en mis labios mientras mis amigas hacen bromas entre ellas. Estábamos en el baño arreglándonos un poco, afuera del baño había una fiesta. Realmente Robin me había obligado a venir a esta fiesta, no estaba de humor para venir.

—Ele, te acaba de llegar un mensaje de un mensaje desconocido. —escuche decir de mi amiga Nancy.

Rápidamente me acerque al celular y lo agarre para contestar el mensaje.

*Te llamare.

*Te dije que estoy con mis amigas, no se pueden enterar.

Empieza a llamar. Es un maldito idiota.

—Ya regreso, chicas. —ellas asintieron y salí del baño. Intenté alejarme lo más que pude de la casa.

+Te dije que no llamaras, Munson.

+Cariño, estoy completamente solo.

Presentí cierta insinuación. Rodé mis ojos y pensé en que decirle.

+¿Y que se supone que tengo que hacer?

+Venir a mi casa, me mudé sabes, y deberías conocer este apartamento... la cama es muy cómoda. ¿Vienes?

+No se, parece que lloverá. Contesté mirando el cielo.

+Lo dudo, te mandaré mi ubicación.

Colgó la llamada y me metí al chat, no estaba tan lejos, y la fiesta estaba muy aburrida. Es una mala idea, ¿cierto?

Me acerqué de nuevo a la casa y me dirigí al baño, ahí seguían las chicas.

—¿Quien era? —preguntó Nancy.

—Era... Steve, sí. —asentí.

—¿Steve? ¿Por qué Steve llamaría? —preguntó Robin.

—Pues me dijo que ya está cerca. —dije guardando mis cosas en la cartera.

—Deberíamos salir, ¿no creen? —preguntó Nicole.

—Sí, salgamos. —contestó la amiga de Nicole.

Decidimos salir y en un abrir y cerrar de ojos cada una estaba bailando con un chico, menos yo, pues no me sentía de ánimos, así que rechacé a cada uno que se acercaba. Miraba mi reloj esperando que la fiesta terminara en algún momento, cuando recibí un mensaje de Eddie.

*Te estoy esperando.

Mierda, está bien.

Salí de la casa sin decirle a ninguna, no sabía en que irme para el apartamento de Eddie, ningún transporte pasaría a esta hora.

Seguí caminando cuando vi una camioneta, vi a su dueño subiéndose, así que corrí y me monte atrás sin que él se diera cuenta.

—Maldición lo que hago por ti, Edward.

Me acosté cuando empezó a llover. Maldecí en mi mente, esto es lo peor que me pudo haber pasado.

La camioneta paró y vi al conductor saliendo. ¿Es en serio? la camioneta se acababa de arruinar. Baje sin que él se diera cuenta y fui a la parada del metro, era mi única opción.

Miraba mi reloj y mi celular, tenía mensajes de Eddie.

*¿Vienes?

*Me aburro, Eleanor.

*Pondré música.

Me subí al metro cuando sentía que todos a mi al rededor me decía que era una mala idea lo que hacía. ¿Buscar a mi ex? mierda, terminamos hace meses, se supone que ya lo habíamos superado.