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¿Habrá boda? :)

Elif corriendo las cortinas de mi habitación y el humo saliendo de una taza de leche con chocolate caliente, fue la primera imagen que vi al despertar.

Sin darme cuenta tan siquiera ya me encontraba sentada en la cama. Mi antebrazo cubría mi cara para que el sol no molestará mis ojos café.

Me llamo Casandra y tengo 23 años. Vivo con mis padres en una gran mansión algo apartada de la ciudad. Este último es uno de los empresarios más destacados de la zona y posee varias haciendas fuera de la ciudad, una empresa y tres caballerías.

Mis manos se extendieron rumbo a la mesita de noche donde se encontraba la taza humeante de leche.

-¿Desea algo más señorita?-pregunto Elif antes de marcharse de la habitación.

-No Elif muchas gracias. ¿Mis padres están en casa? - pregunté mientras me levantaba de la cama y me ponía el abrigo de satín que pertenecía al pijama.

-Su padre salió temprano rumbo a las empresas y su madre está en su recámara comunicándose con la empresa que se encargará del pastel de tu boda- respondió tranquila parada bajo el marco de la puerta.

Al oír la palabra "boda" sali de mi habitación a paso acelerado y avance por la casa hasta llegar a la habitacion de mi madre.

No sé qué cree. Quiere que me casé con Jack Vermont, uno de los más grandes herederos de la zona. Su padre es socio de mi padre y poseen una gran fortuna. Como en la mayoría de los casos quieren que contraiga matrimonio con el chico por dinero. No voy a tolerar eso.

-¡Madre!- entre decidida a la habitación y me pare frente a ella.

Hablaba por teléfono muy tranquila sobre el comodín. Su cabello rojo risado caía sobre su vestido de tela francesa, blanco y verde, de las mejores boutiques.

-Aguarde un momento ahora le llamo- colgó el teléfono y dirigió sus ojos verdes hacia mi-¿Que pasa querida?

-Habiamos hablado ya el tema de la boda. No me voy a casar con Jack.

-Y habíamos hablado también que esa decisión está tomada no es algo que debamos discutir.

-Madre no amo a Jack.¿Vas a tolerar que tu hija se case con un hombre al que no ama? -pregunte incrédula.

-Hija es por tu bien, y ahora sí me permites tengo mucho que hacer todavía. Tengo que ir a visitar a la diseñadora que hará los trajes y luego a recoger tu vestido. Esta hermoso, ya verás. ¡Vas a estar guapisima!

Diciendo esto tomo su bolso y se marchó provocando el abrumador resonar de sus tacones a lo largo del pasillo.

Aproveche el hecho de estar en su recámara para hechar una ojeada. Revise algunos cajones pero no encontré nada que captará mi atención.

En esa ocasión en lugar de regresar a mi habitación fui hacia la cocina que quedaba en la parte baja de la casa, justo a la izquierda, luego de bajar las escaleras.

Allí se encontraba Leonor, y Elif las dos cocineras de la familia Werts.

-¿Desea algo señorita?-pregunto Leonor poniéndose uno de los guantes de horno para introducir en el su delicioso pan de mozarela.

-No, gracias. ¿Que estás preparando?

-Tu madre me pidió que preparara mis deliciosos dulces para la cena de ensayo. Será esta noche-esto último lo dijo eliminando la sonrisa que tenía plasmada en su rostro.

Luna De SangreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora