A veces cuesta mas eliminar
un solo defecto
que adquirir cien virtudes...
Lo miro sonrojada. Mis mejillas ardían tras sufrir el contacto visual con uno de los rostros mas hermosos que habia visto.-Me-me tengo que ir-tartamudeé tratando de desviar la mirada.
El no protesto, ni rechisto. Se quito de mi camino a lo que sali apresurada del lugar. La verdad quisiese que me hubiera tomado por el cuello y me hubiera dicho algo posesivo como "eres mía" o "te haré mía" pero...espera.¿Que estoy diciendo por dios?
Sacudi mi cabeza para desechar ese tipo de pensamientos mientras caminaba por aquellos campos camino a casa.
Cuando llegue, misteriosamente sana y salva, Jack no estaba en casa. Me vinieron a la mente los recuerdos de todo lo sucedido y como empezaba a caer la noche decidi tomar un baño para refrescarme.
Una taza de leche con chocolate caliente y una manta eran mi compañia sobre la butaca junto a la ventana.
" A mi hija no. Ella no tiene que ver con esto. Pero su marido y el mio si, Albert y Jack no deben vivir mas"
Las palabras de mi madre resonaban en mi cabeza una y otra vez.
Joder
Comenzaba a asustarme.
¿Que era tan terrible para que alguien como mi madre dijese eso con tanta frialdad?
El hecho de mencionar mi nombre cerca de algo que proporcionara la muerte ya era algo lo suficientemente significativo para pensar que habían quitado a mi madre y en su lugar habían puesto a una desconocida.
Miraba a la nada con el objetivo de olvidarme de todo, de quitar de mi mente aquellos recuerdos, de olvidarme del casi beso de Aegan y de su cuerpo cerca del mio.
El click de una notificación en mi teléfono me hizo volver a la realidad. Pensaba que lo había perdido en el recorrido pero lo había dejado en casa. Lo mire por unos instantes hasta que estire la mano.
En la pantalla un mensaje de Jack me avisaba que no llegaría hoy. Que pasaría la noche en la oficina porque había demasiado trabajo y volvería al otro día.
Bien, ahora pasaría la noche sola ademas de todo. Pasé en esa butaca alrededor de una hora y media y luego fui a la habitación. Esa noche habia calor y la habitación era bastante calida por lo que me recoste en la cama luego de abrir las ventanas y puse una película.
La película estaba lo suficientemente aburrida para que me entrara algo de sueño y me durmiese sin terminar de verla. Mis ojos poseían cansancio y no los torture dejándolos abiertos. Pero me olvide por completo de la ventana. Dormí toda la noche con ella abierta...
Narra Aegan:
La noche estaba oscura, la luna era llena y la ventana de Cassandra se quedo abierta. La oportunidad era mas que obvia.
Era hoy o nunca.
Me acerque a la casa verificando que solo se encontraba ella, y efectivamente. Entre sigilosamente por la ventana con el cuidado necesario para no despertar su cuerpecito delgado que dormía tranquilamente como si hubiese tomado esas píldoras que toman los humanos para el sueño.
Debía actuar o actuaria mi hermana primero e intentaría matarla. Ya para ese entonces seria tarde.
Me arrodille en la cama delante de ella y la observe por unos minutos.
Demasiado tierno para la oscuridad de mi vida.
La verdad no se porque le habían ocultado eso a Cassandra por tanto tiempo. Tenia derecho a saber que era y de donde salio.
Acerque mi rostro a su cuello y aparte un mechón de pelo que descansaba sobre el. Aproxime mi boca e introducí mis colmillos en su carne, produciendo en mi un escalofrío tenaz. Jamas habia despertado el vampiro dormido de nadie. Cassandra habia sido la elegida por mis superiores y sentía que con eso le estaba fallando. Ella no se movió, creo que ni lo sintió. Dormía igual que antes. Me quede observándola un rato y luego me fui por donde entre.
Camino al templo comencé a sobrepensar todo.
La mordida...
El acercamiento en el cuarto...
Todo...
Bueno ya no podía, era demasiado tarde para arrepentirse...
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Luna De Sangre
Teen Fiction¿les ha pasado que espían a un chico con la intencion de descubrir sus defectos y terminas siendo uno de ellos? me gusta jugar con la mente de los lectores y que cuando piensen que todo estara bien....pum! Dejar caer la bomba, así que agarrense los...