DIENTES
__________________- ¿Oye, Levy?
- ¿Hmm? - Levy estaba sentada en el suelo, con un espejo colocado sobre una silla delante de ella y pintándose puntitos rosas en las mejillas, así que pasó un momento antes de que pudiera alzar la vista. Cuando lo hizo, encontró a Gajeel mirándola con ese pequeño pliegue de preocupación que a veces se le formaba entre las cejas. Una arruga adorable - ¿Que sucede? - preguntó.
Gajeel miró de nuevo hacia el televisor frente a él. Estaban en el departamento que compartía con otros músicos; no había televisión en la casa de Lucy, donde Levy vivía ahora la mayor parte del tiempo --por fin se había calmado un poco el circo mediático-- y dónde solían pasar la noche las dos. Estaba comiendo cereal de un tazón y poniéndose al corriente de las noticias mientras Levy se preparaba para la presentación del día.
Aunque les daba un dineral, Levy empezaba a cansarse de todo ese asunto. El problema de los espectáculos de marionetas era que debían repetirse una y otra vez, lo que requería un temperamento del que ella carecía. Se aburría con demasiada facilidad. Excepto de Gajeel.
- ¿Cómo lo haces? - le había preguntado ella hacía poco - Casi nunca soporto a la gente, ni siquiera en pequeñas dosis. Pero nunca me canso de estar contigo.
- Es por mi superpoder - había respondido él - Una inmensa capacidad para hacer compañía.
Gajeel volvió a apartar los ojos de la pantalla de televisión con la arruga de preocupación cada vez más marcada.
- Lucy solía recopilar dientes, ¿No?
- Eh, sí - respondió Levy distraída. Palpó a su alrededor en busca de sus pestañas postizas - Para Acnologia.
- ¿Que tipo de dientes?
- De todo tipo, ¿Por qué?
- Ajá.
¿Ajá? Gajeel volvió su atención al televisor, y Levy de repente se puso alerta.
- ¿Por qué? - preguntó de nuevo, levantándose del suelo.
Alzando el control remoto para subir el volumen, Gajeel respondió:
- Tienes que ver esto.
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Días d Sangre y Resplandor #2
Fiksi PenggemarLa estudiante de Arte y aprendiz de monstruos, Lucy, tiene por fin las respuestas a las preguntas que se lleva haciendo desde niña: por fin sabe quién es y, sobre todo, que es. Pero junto a esta verdad ha conocido otra mucho más dolorosa: el ser al...