A la mañana siguiente, cuando el despertador sonó a las 6:10 am, Jungkook lo apagó y siguió durmiendo hasta las 10. Cuando se levantó el exceso de sueño le pasó factura en forma de una somnolencia a la que no estaba acostumbrado pero, en cuanto se disipó, la ligereza que se adueñó de su cuerpo le confirmó que necesitaba aquel descanso.
Fue al despacho de Bogum en cuanto hubo desayunado. Entró, le dijo que aceptaba tener un psicólogo deportivo siempre y cuando no repercutiera en sus horarios de entreno y volvió a salir, dejándole con la boca abierta y la pluma con la que firmaba documentos suspendida en el aire, goteando sobre la mesa. Estuvo el resto de la mañana acompañando a Jieun mientras ella practicaba el número para su competición. Por la tarde, durmió un poco más, de modo que para cuando acudió a su cita en el hospital su estado nada tenía que ver con el que tenía ayer mismo. Se sentía mucho mejor, también, y por un momento, cuando entró a la consulta de su médico y el doctor le preguntó, sonriendo, si había algo en especial por lo que había pedido una revisión, estuvo tentado a decir que no.
El doctor apartó la mirada de sus notas.
—¿Jungkook? —le repitió, pestañeando. —¿Hay algo nuevo?
¿Algo nuevo?
La imagen borrosa del rostro preocupado de Taehyung se materializó frente a sus ojos.
Sí, pensó, mientras la caricia fantasma de unos dedos gentiles le rozaba la mejilla, muchas cosas.
Las había. Tantas que eran difíciles de desempaquetar, así que se contentó con decirle sólo lo relacionado con su salud y guardarse el resto como un secreto justo. Salió de la consulta con un regaño, la tarea de comprar un multivitamínico, un análisis de sangre que, Dios sabe cómo, sólo indicaba un leve déficit de vitamina D, y la sensación floreciente de que necesitaba ver a...
Se detuvo de golpe, creyendo haber visto a Taehyung en la sala junto a la que acababa de pasar.
No, ¿verdad?
Girándose, buscó el letrero de la pared, que rezaba "Traumatología" en letras grandes y negras, y volvió sobre sus pasos. Efectivamente, el hombre estaba allí, sentado, perfectamente reconocible en un chándal verde bosque. Tenía las piernas cruzadas una sobre la otra y la punta de un dedo entre los dientes mientras miraba distraídamente su móvil. Parecía ansioso por algo.
Jungkook se acercó. Como si hubiera notado su presencia, Taehyung levantó la mirada, sorprendiéndose al verle allí. Sin embargo, sus facciones se suavizaron al ver la nota del doctor en su mano. Abrió la boca, probablemente con la intención de preguntar al respecto, pero justo en ese momento una doctora salió de su consulta y anunció su nombre en voz alta, haciéndole mirarla.
—Soy yo. —dijo. Ella asintió.
—Puedes pasar.
Jungkook dio un paso hacia atrás cuando Taehyung se dirigió hacia allá. Pretendía sentarse a esperar a que terminara, pero el hombre se detuvo a medio camino para mirarle con una ceja arqueada y, no sin antes haber mirado a su alrededor como un idiota, se dio cuenta de que le estaba esperando.
—Bueno —La doctora les sonrió amablemente, señalándoles las sillas frente a su escritorio para que tomaran asiento. —, ¿cómo has estado, Taehyung?
—Muy bien, gracias. Siento la rodilla mucho mejor.
La sonrisa de la mujer se extendió un poco. Sólo un poco. Si Jungkook no hubiera tenido los ojos clavados en ella mientras se sentaba, si no hubiera conocido muy bien la expresión de un médico que sabe las consecuencias que tendrá lo que está a punto de decir, no se habría dado cuenta del cambio.

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Olympic - TaeKook
ФанфикLos Juegos Olímpicos son dentro de nueve meses y Jeon Jungkook, la promesa de Corea del Sur, está preparado.