Tras lo ocurrido, el ambiente se enserio de golpe, las chicas hacían todo lo que hacían con mucha concentración y seriedad, y más atentas a todo que nunca, y eso se les notaba en el hecho de que no podían relajarse, mientras trabajaba con unas cosas, algo pesado se me cayó he hizo bastante ruido, onda como ese vaso de aluminio a media noche, como mierdas puede sonar tanto un vaso.
El punto es, que en cuanto eso sonó, todas pegaron un brinco casi que como un gato saben, solo falto que a todas se les erizara el pelo y en caso de Safira, las escamas, que creo que eso pasa entre unas razas de Wyverns.
—Señoras mías, y de Loki.
—Tarado.
—No quiero peos con tu marido. Ejem. —Me aclare la garganta. —Sé que están nerviosa, y preocupadas, pero ponerse así por cualquier pendejada no les hará bien, ya se nota que les está afectando la cosa, están durmiendo hasta mal, en las noches dan más vueltas en esa cama que ropa en lavadora, y así no se puede, eso no es nada bueno para su salud mental ni física.
—Pero Lex... —Trato de reprochar Nana.
—Pero nada. —Interrumpí. —Necesito que todas se me tranquilicen y se me relajen, y creo que ya tengo una idea de conque conseguir eso y hasta que lo termine, se me quedan allí mientras trabajo, quietecitas y tratando de calmarse todas y cada una.
Básicamente les termine haciendo a esas mujeres, un Jacuzzi con hidromasaje, todo fuera de la casa en un lugar adornado todo por mí para que una vez estuviéramos fuera, no se dañara nada.
El resultado de mi experimentación fue un éxito y para las seis de la tarde de ese mismo día, esas mujeres estaban todas acomodadas en esa bañera mientras ella agua caliente y los chorros de agua se hacían cargo de lo demás haciéndola sacar suspiros de alivio y uno que se escurría como un medio gemido y no sé por qué. Solo sé que era un ganar ya que mientras ella se relajaban yo las podía ver al mis a mis damas, en unos apretaditos y un poco cortos bikinis, ya que para Infinity fue uno de una pieza al igual que con Lilith.
—Esto es el paraíso... —Susurro Infinity.
— ¿Están segura que no estamos muertas ya?
—No quiero salir de aquí... —Sonrió mi niña malcriada.
—Que bien que a todas les gusta. Luego de eso, todas se me van a ir a la cama luego de tomar un vaso de leche tibia está claro.
—Siiii...
Están estregadas las muy sinvergüenzas, pero es eso a que anden tensas y al borde del colapso nervioso. Y saque unas buenas fotos para mi colección, ¿soy un pervertido? Si, obvio, pero con honor. Y ellas tampoco ayudan, porque Débora y Safira aprendieron a posar para mis fotos y eso solo hace que quiera tomarles más.
Como extra al menos a mis señoras y mi niña bonita. Cuando subieron a acostarse les di un mansaje recordando mis clases de quiropráctico a cada una para ayudarlas a dormir, lo cual paso bastante rápido, más cuando hice que Nana abrazara a Débora y Safira, sé que con eso iban a estar en coma hasta mañana, por mi parte regrese al piso de abajo para ponerme a trabajar yo en unas cosas, entre ellas la ropa de Lula, que debía corregirle unas cositas para que ella pudiera usarla adecuadamente, me gusta el atuendo, es el atuendo digno de un ninja, no resalta mucho, y eso es lo mejor.
—Lex.
—Dime Snow.
— ¿Cuándo nos vamos?
—Pues diría que pronto. —Respondí. —Ya tenemos casi todo listo por aquí. Ya las chicas están más avanzadas en su entrenamiento, he hicimos lo que había que hacer por aquí, tenemos los metales, y Lula tiene la espada.
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Life Reform.
Adventure¡Hey tu! si tu, ven te invito a leer las locuras que hago y las cosas que me ocurren en este gran y mágico mundo, lleno de Monstruos, waifus, mas waifus, y muchas aventuras por hacer, vamos, se que quieres hacerlo, puedo verlo en tus ojos y en tu bo...