Life Reform.

Capítulo 22: Celo.

Me quede un rato afuera descansado y contemplando el firmamento, hacía mucho que no lo hacía y estaba realmente bonito esa noche. Cuando estime ya las chicas se habrían bañado, fui yo a hacerlo para luego irme a recostar, y mi sorpresa fue que Safira esa noche se uniría a nosotros en la cama.

—Ahora si está el paquete completo. —Bromee antes de bostezar con fuerzas. —Diablos ya me está dando sueño... bien damas ya saben el protocolo, es hora de descansar.

—Hoy fue un día muy ajetreado Lex. —Suspiro Nana. —Tuve que curar a muchos heridos.

—Lo siento por eso. Pero bueno, a lo hecho pecho.

Me acomode en la cama para que mis damas tomaran cada quien su lugar, Safira a mi izquierda y Nana a mi derecha, Débora y Lilith medio compartían mi pecho, la cosa es que me dejaban completamente inmóvil.

—Buenas noches a todas.

—Buenas noches Lex.

—Descasa mi Rey. —Despidió al darme un beso y acomodarse, su cuerpo se sentida ligeramente más cálido de lo usual debieron subirle la temperatura al agua o que se yo.

En lo que Nana me abrazo caí muerto. No tengo mayor recuerdo del mundo, más que unos cuantos sueños calenturientos con las Milfs Dragonas, ya me están empezando a afectar hasta en mis sueños, que problema.

No sé cuánto tiempo paso. Solo sé que allí estaba yo, hasta que algo trajo mi conciencia de regreso a mí.

—Lex... arriba.

—Hmmm...

—Arriba, algo raro pasa.

Mis lobos me despertaron con cuidado de no despertar a las otras, y les tomo unos minutos conseguirlo.

— ¿Qué pasa? es demasiado temprano.

Creo que es casi la misma hora que ayer.

Como literalmente estaba apresado por todas mis mujeres y Safira ya estaba casi por ahogarme en medio de sus pechos, me toco hundirme en mi sombra para que esta me escupiera al lado de Luke.

— ¿Qué pasa?

— ¿No hueles eso? —Pregunto Luke viéndome a la cara.

—Huele muy raro, nos despertó ese olor. —Siguió Snow resoplando por el probablemente fuerte olor para ella.

— ¿Oler?

Olfatee un poco, y si había un ligero olor diferente en el aire, pero mi nariz actual no me iba a dejar identificarlo, por lo que me toco volverme también un lobo gigante gris, para usar mejor mi olfato, y fue cuando el olor me golpeo fuerte.

—Ufff... —Resople al sentir ese olor, me golpeo fuerte los sensores. — ¿Qué rayos es eso?

—No lo sabemos, pero se originó en esta habitación.

—Vayan afuera, no quiero que esto les lastime el olfato, yo veré de que se trata.

— ¿Seguro?

—Sí, seguro, vayan con Infinity y quédense con ella hasta que termine de amanecer.

Vi a Luke y Snow irse antes de como un perro haría, comenzar a buscar y olfatear por todo el lugar, el olor estaba muy disperso pero poco a poco lo pude ir ubicando, y digamos que el que las chicas se movieran al no sentirme en la cama ayudo mucho a ubicar la procedencia. Solo sé que olfateando casi me olvide de mi vista me centre en oler hasta con mi nariz llegar a la fuente lo que aumento mucho más la fuerza y concentración del olor.

—Rayos... —Susurre al sentir como me sangraba la nariz, me estaba quemando las paredes de las fosas nasales.

Es un olor muy fuerte, pero no huele mal, es dulce, algo embriagador y muy intoxicante eso es lo que puso así mi nariz.