Que tal si esas manchas son el producto de las noche en que él se masturba al costado de mi cama, además, que yo tengo problema de insomnio después de la muerte de mi marido y muchas noches, por no decir todas, hago uso de medicamentos recetados que me hacen dormir toda la noche, aparte de que uso una mascara de noche para proteger mis ojos.
Me puse a pensar ¿Será eso posible? Además, mi hijo es amigo de Javier y quizás éste ya le contó lo que hace él con su madre y mi hijo quiere hacerlo conmigo.
A la mañana siguiente me desperté fijándome en todos los detalles, mi cuarto estaba vacío, pero la puerta estaba entreabierta y yo estoy segura de haberla dejado cerrada, me levanté a mirarme en el espejo y encontré que un botón de mi pijama estaba abrochado incorrectamente, decidí sacarme mi pijama, me baje los pantalones moviendo mis caderas y este cayó hasta el suelo, con mis glúteos desnudos me observé en el espejo, note en mi seno cómo si tuviera algo reseco y pegajoso en mi piel, me acerqué bien y me pareció cómo si mi piel estuviese descamada justo en la hendedura de mis exuberantes senos, comencé a frotar con una mano y las escamas cayeron en el lavamanos, llegué a la conclusión de que se trataba de semen seco y no era mi piel la que se estaba resecando.
A mi esposo le encantaba meter su miembro entre mis senos y follármelas hasta correrse copiosamente en ellas, sé que a la mayoría de los hombres les gusta embadurnar de semen los senos de su mujer, es natural para ellos y les da mucho placer, con mi esposo aprendí a disfrutarlo yo también y con mucho placer le dejaba correrse sobre mis senos, gozaba sintiendo esos enormes chorros de semen escurriendo sobre mi delicada piel, a veces me metía su pene en mi boca y me regalaba las últimas gotitas del semen, más tarde se secaba en mi piel y luego se desprendía exactamente igual que esta que me encuentro ahora mirándome al espejo.