𝟮𝟮. 𝗦𝗘𝗖𝗧𝗨𝗠𝗦𝗘𝗠𝗣𝗥𝗔 [+18]

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𝐒𝐞𝐜𝐭𝐮𝐦𝐬𝐞𝐦𝐩𝐫𝐚















"Éramos la caja de Pandora personificada, solo fue necesario abrirla para darnos cuenta de lo profundamente venenosos que realmente éramos juntos."














Mi cuerpo desnudo se aferraba al suyo con fuerza, el frío de la mañana empezaba a calarme la piel y sus caricias en la curva entre mi espalda y mis glúteos aligeraban mi respiración. Me imaginé millones de veces despertando de esta manera, siendo completamente suya.

Me deleité con su presencia, observando como la luz que entraba por la ventana acentuaba el color de sus ojos, acaricie su pecho; cuando las yemas de mis dedos pasaron por los arañones en carne viva que le había provocado, Gellert soltó un gruñido profundo.

— ¿Te arde? — Pregunté sin despegar mis dedos.

— Un poco— Musitó el rubio mientras bajaba una de sus manos hacia mi muslo para arrastrar mi pierna y posicionarlas sobre su abdomen, gemí por el dolor que aquello ocasionó en mi pierna entumecida.

— Freezer ¿en verdad estas dispuesto a someterte ante Voldemort?

— Las únicas marcas que deberían de haber en tu cuerpo son las realizadas por la lujuria en la que nos embriagamos. Me suplicaste ayuda, que te salvara y te alejara del abismo; irrumpiste en mis pensamientos y creaste una obsesión insaciable en mí, verte sufrir sería, para mí, como quemarme vivo. — Gellert empezó a acariciar mi pierna con sus uñas — Cada parte de mí ya ha sido corrompida, será un momento efímero y luego podré deleitarme con la imagen de su asesinato, una muerte orquestada por ti.

— ¿Evitarás qué enloquezca?

— Te enseñaré a utilizar esa locura ¿quieres convertirte en alguien, verdaderamente, invencible? — La oscuridad en su voz me erizó la piel, sabía que los sentimientos en Gellert, al pensar en volver a ser ese hombre dominante para la sociedad, eran completamente grises. Él amaba el poder por sobre todas las cosas, puede que incluso sobre su obsesión conmigo.

— Sí, quiero — En diferencia, yo no anhelaba el poder. No necesitaba un mundo entero a mis pies pero quería vivir la satisfacción de observar a aquellos que algunas vez atentaron contra mí y mi familia arrodillados ante mí.

En poco tiempo la primera persona pagaría por su gran hipocresía.

— Te daré cada cosa que desees, mi niña.

— No puedo dejar de sentir qué nos estamos quedado sin tiempo.

— ¿Sin tiempo para qué?

— Sin tiempo para ser libre — Gellert me tomó el mentón y me hizo mirarlo con un ligero movimiento.

— Debo aceptar que, jamás me he sentido tan libre como en este último mes tanto física como mentalmente pero, encontré un lugar bello para nosotros dos.

— ¿Dónde? — Musité sobre sus labios que rozaban los míos al hablar.

— Lo sabrás cuando debas saberlo aunque, puedo decirte que tiene una pequeña torre con vista directa a la luna para que puedas hablar con ella, un patio por donde podrás correr si así lo deseas. Te prometo que jamás te haré sentir atrapada, no mientras estés conmigo.

— ¿Y nadie podrá encontrarnos? — Se me creó un nudo en la garganta, Gellert conocía cada detalle que me hace sentir un poco más viva.

— Absolutamente nadie, seremos tú y yo ¿eso podría ser suficiente para ti?

𝑨𝒃𝒅𝒊𝒕𝒐𝒓𝒚  [ Experiencia de RD]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora