ANTES QUE SALGA EL SOL

286 12 0
                                    

*el penúltimo *

Teníamos todo más que preparado para la llegada de Aitor.
Los meses de espera habían dado su fruto; y entre pintura, muebles, carrito y ajustes el noveno mes entró.
Era, absolutamente, una albondiguilla recién redondeada, y habitaba en mi una dualidad de alegría y nervios que auguraban un parto animado.
Salía de cuentas en esta semana, para ello Mimi había pausado todos los compromisos y anunciado a sus seguidores una pausa más grande, en pos de su vida personal.

MIMI: ¡Me encanta esta barriguita! (acariciando mi tripa) ¡Peque! ¡Sal ya! Y no nos lo hagas pasar mal, sobretodo a mami que está nerviosa.

INGRID: (acariciando su cabeza) ¿Sólo mami está nerviosa? (Sonrío) Igual alguien por aquí (la beso) también está nerviosa por estrenar maternidad.

MIMI: (sonrojada) ¡Sí! Muy mucho (beso) tengo muchas ganas de verle la carita. (Cruza los dedos) ¡por lo dioses, que salga vikingo como tú!

INGRID: (riendo) ¿vikingo?

MIMO: (asiente) Sí, así rubito, fuerte... Alto, alto tiene qué ser, que menudos genes lleva (nos señala) ¿no?

INGRID: (acaricio su cara) Pero cariño... (río) definitivamente estás más nerviosa que yo. (Me abrazo a ella)

Dedicándonos un momento de "moñeria" y "arrumacos" estábamos cuando su teléfono comenzó a sonar, era su representante, así que inmediatamente cogió la llamada y por sus gestos y gesticulaciones, entendí que el mensaje que estaba recibiendo no era de su agrado, sin embargo, cerró la conversación con un : - esta bien, nos vemos-.

INGRID: (acercándome al borde del sofá donde estaba sostribada) ¡uy! A ver esa cara de ofuscación, ¡qué plan te han puesto que no te apetece!

MIMI: (suspirando) ¡cómo es posible que sepas tanto sin que yo te diga una palabra! (sentándome de lado en sus rodillas)

INGRID: (besando su nariz) Porque te voy entendiendo, y porque me encanta descifrar tu lenguaje corporal (sonríe)

MIMI: Mañana por la noche, evento. Presentación de una serie nueva, con posibilidades de "cameo" al final de temporada porque es de baile y música.
Eso y que va media industria y no puedo faltar (pone una cara triste)

INGRID: (agarro su cara) !y qué problema hay! Seguro que es una buena oportunidad, y desde hace meses que no te manifiestas en ninguna actividad. Es importante. Además, así elegimos look juntas. Yo te ayudo.

MIMI: ven conmigo...

INGRID:(la miro) ¡Mimi! ¿No me ves? Estoy gordísima, no entro en ningún outfit "normal" y aquí tu hijo puede decidir nacer en cualquier momento.

MIMI: (pone un puchero) No quiero dejarte sola, y no puedo decir que no (niego) Te prometo que sólo es photocall, proyección y precisamente con la excusa, nos vamos. ( se besa los dedos cruzados) ¡prometido!

INGRID: (acaricio su cara) ¡vale! (Suspiro) Hacemos una cosa; voy, te acompaño. Pero del photocall te encargas tú, y al acabar la proyección nos vamos. ¿Trato? (Beso)

MIMI: (acariciando la tripa mientras me besa) ¡trato! ¡Te adoro! (Beso) Aitor, mami es genial.

La elección del vestuario en su caso llevó escasos 10 minutos, sin embargo, yo debía salir a comprarlo esa mañana, desde que mi tripa empezó a crecer no usaba más que ropa ancha y petos premamá que eran de todo menos "elegantes" para una presentación.

El sufrido Axel se ofreció a ser mi asistente de imagen, y así poder pasar un ratito con el antes de la vorágine del bebé que se avecinaba.

AXEL: Vamos a ver, Ingrid, es un rato de nada. No seas dramas. Te presentas, si se tercia te haces una foto, que se lo merece y así parece que no va sola, ves la proyección y os vais a casita para esperar a que este "ternerito" (tocando mi tripa) decida hacer su aparición a este maravilloso mundo.

TRENDYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora