La mamá de mi mejor amiga

Capitulo 19. Acompañarte

Arizona.

En mi cuerpo había estallado un torrente de emociones incontrolables, podía sentir en todo mi cuerpo cómo recorría este sentimiento, sentimiento que provoca Calliope.

Quería matar algo que quiere vivir a toda costa.

Con April estuvimos viendo la serie durante toda la tarde y apreciaba en el alma que la señora Torres aún no llegara.

Aunque también quería verla , lo mejor para todos era que yo la olvidase.

-Gracias por tu grata compañía Arizona, la pase increíble - April sonríe.

-Yo igual, ame ver que Wantimord le dijo a Liria que la amaba, espere eso 3 temporadas - Dije emocionada.

-Quien diría que el amor es así de difícil - Ríe.

-El amor es más que tres temporadas April, es una angustia que quema sin piedad.

Eso salió de mi como una bocana de aire.

-Wow qué profundidad - Ríe April - ¿Soy yo o estás sufriendo por amor?

La pregunta de April me dejo paralizada.

-¿Estás loca? - reí, pero estaba muy nerviosa - ¿Por quien voy a estar sufriendo?

-No lo se, dime tú -Encogió sus hombros.

-No digas tonterías - Voltee los ojos haciéndome la indiferente - Mejor me voy, mamá odia que llegue tan tarde.

-Nos vemos mañana en la escuela - Sonríe y nos damos el último abrazo.

Tenía una esperanza, esperanza en ver a la señora Torres antes de subirme al autobús, pero no y me di cuenta que estaba siendo arrastrada a ella y no podía hacerme eso.

Porque aunque no lo quería, aunque no lo deseara, el corazón caía en la tentación, tentación abrumadora, pero enamorada de esa tentación, de lo prohibido que te envuelve a vos.

Y otro día volvió a comenzar, otro día lleno de nuevas metas, me di cuenta que la vida seguía de alguna forma, solo tenía que hundir los sentimientos amargos no a mi.

El atardecer de colores naranjas decoraba las calles de Seattle, era tan vivaz, tan agradable para los ojos, hacia que correr debajo de el fuera gratificante.

Entrenaba con mucho esfuerzo para la competencia y era lo único en lo que debía pensar.

Correr me libera, correr me hace sentir invencible, puedo con todo cuando corro por esa pista.

Pero también me mataba al sentir ese fuego en mi piel, tanta indiferencia de Calliope me quemaba el cuerpo y no podía pedir ayuda.

Me ahogaba en un mar de indiferencia y prefería ahogarme que pedir ayuda.

No creo poder soportarlo.

Después de entrenar iba por las frías calles de Seattle, el abrigo que traía me cubría del frío tan escalofriante y caminaba con mis audífonos a todo volumen.

El atardecer de colores se desvanecía a cada paso que daba, los colores en cielo se veían diáfanos cada vez más.

Caminaba apurada, tenía hambre, frío y unas ganas incontrolables de llorar al escuchar el párrafo de la canción que escuchaba.

"Porque estoy loca, necesito que vengas rescatarme"

Off to the races ~ Lana del Rey.