La mamá de mi mejor amiga

Capitulo 1. La señora Torres

Arizona.

Hoy iniciaba el instituto después de largos meses de vacaciones, estuve con mi madre por toda Europa, después de tanto tiempo se decidió a pasar unas vacaciones conmigo.

El sol en Seattle era como una anomalía no vista, siempre hacia un frío infernal o llovía a menudo, hoy al parecer los dioses de la naturaleza decidieron que merecíamos un radiante sol para poder retomar nuestras labores escolares.

El sol estaba a su máximo esplendor, mientras caminaba hacia el instituto podía sentir las caricias cálidas en mi piel, haciendo que brillara en un tono gratificante.

Al llegar al instituto me demoré en entrar, sentir el sol de esa manera en mi piel no era algo tan particular como el resto de los mortales, siempre sentía la gotas frías de la lluvia o la brisa fría congelar mi piel.

-¡Arizona ! - Escuche como April venía hacia mí con una sonrisa, dándome un abrazo repentino

-Hola a ti también - reí mientras April me apretaba con fuerza.

-Estoy tan feliz de verte, estas vacaciones fueron eternas - Sonríe mientras se despegarse suavemente de mi pecho.

-Yo también estoy muy contenta de verte- Sonreí - Pero tú no la pasaste nada mal, vi tus fotos en Cancún - reí mientras cerraba mi casillero.

-¡Mi madre tiene una casa en la playa y pude broncearme al fin ! - Alza su voz mientras me muestra por debajo de la chaqueta del uniforme su piel bronceada.

Solo reí, al tiempo tocaron la campana y ambas entramos a nuestros salones.
Después de una clase mortificante de Geografía, llegó la hora del almuerzo.

-¿Y qué hicieron en sus vacaciones, vagabundas? - Ríe Teddy sentándose en la mesa de siempre.

Amelia, Jo y Teddy eran mis amigas desde la infancia, conocimos todo de cada una de nosotras, éramos como las 4 mosqueteros, o bueno, ahora que April llegó somos 5.

April había llegado el año pasado, prácticamente faltaban 4 meses para terminar el año, llegó como un astronauta pérdida en el espacio, así que nosotras la acogimos y la hicimos sentir como en casa.

-Mis padres me castigaron, así que no quiero hablar de sus vidas perfectas - Volteaba los ojos Amelia.

-¡Eso te pasa por drogarte ! - Alza un poco la voz Teddy, haciendo muecas juguetonas a Amelia, que la miraba enfadada.

-Solo fueron dos veces - protesta - Ademas ustedes lo hacen también - Come un bocado del sándwich de pavo que traía.

-Pero nosotras no dejamos que nuestros padres nos vean en ese estado  - Conteste con una risa sarcástica.

Amelia me saca el dedo del medio, haciéndonos reír.

-Ya que veo que el tema del verano es rechazado por Amelia, hablemos del proyecto de geografía - Sonreía como de costumbre April.

-¿Qué proyecto? - pregunta Jo.

-El de la maestra Rochester, vieja para ser tan aburrida - Volteaba los ojos indignada.

No me gustaba geografía, ni la maestra Rochester, era una vieja que ya olía a muerto, que dejaba talleres extremadamente largos, mínimo 55 preguntas y para la clase siguiente, ósea mañana.

-Justo hoy que Alex por fin se animó a tomar un helado conmigo - Jo apretaba sus puños en señal de molestia y los dejó caer en la mesa, provocando un ruido fuerte.

-Debería pensionarse y dejarnos en ¡Paz! - Se quejaba Teddy

-Arizona y yo compraríamos los nuevos "Froy Yogurtz" - Amelia deja caer su bello rostro en la mesa.