Capitulo 25. Contigo

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Arizona.



-Arizona vamos, tengo demasiado sueño - Dice April acercándose a su mamá.

-¿De que hablas? - pregunte confundida - Yo me iré con Am.

-Pues le dije a Am que dormirías en mi casa, así que ven - Contesta mientras pone ambas manos en su cabeza.

-No debiste April, yo tomaré un taxi - Murmure apenada por tener la mirada de la señora Torres encima.

¿Ninguno de estas borrachas se da cuenta que estoy incómoda?

-¡Cual taxi ni que taxi! - Grita - ¡Vas a mi casa y punto !

No quería seguir discutiendo,se notaba que April borracha era insoportable, igual iba a perder.

Asentí apenada y voltee a ver a Eliza que reía con la escena.

Estaba muy nerviosa, temblaba y Eliza lo notó, me miró confundida en medio de su borrachera.

Al parecer lo único que se le ocurrió para calmarme fue darme un beso.

Tomo mi rostro en entre sus manos y me beso con mucha calma, pero el beso fue subiendo de tono cuando bajaba sus manos por mis caderas y yo decidí ponerlas en sus mejillas por instinto, sentía las miradas de Callie y April en nosotras.

Por un momento quise alejarla, pero recordar que la señora Torres me estaba viendo y me dio la idea de recodarle lo que ella se perdía.

Eliza subió su mano acariciando toda mi espalda,  cosa que me provocó un gemido involuntario y aumento mi calor al sentir como apretaba mi cadera hacia ella.

Pero April carraspeó obligando a separarnos.

-Lamentó por interrumpir lo que sea que sea eso, pero nos esperan Arizona - Me dice enojada por mi imprudencia.
Mire a su madre que estaba con el ceño fruncido y los brazos cruzados mirándonos fijamente, era obvio que estaba demasiado molesta.

No fue mi intención, o si?

-Disculpa - Dije apenada - ¿Nos vemos el lunes?

Ella asiente con una risa y luego deja un pequeño beso en mis mejillas.

-Hasta el lunes chicas - Sonríe y veo cómo para un taxi.

April me toma la mano y caminamos hasta el auto de su madre, donde nos abre la puerta de atrás, nos montamos y luego Callie la cierra de un portazo que aturdió mis oídos vulnerables por el alcohol.

Arranco sin decir ni una palabra.

Todo me daba vueltas y la cabeza comenzaba a dolerme, enserio estaba arrepentida de haber tomado tanto. April al contrario ya dormía sobre mi hombro como si estuviera en su cama, ya hasta escuchaba sus ronquidos.

El auto estaba en total silencio, solo escuchaba las ruedas rechinar.

Pero Calliope hablo un rato después.

-¿Qué tal la fiesta? - pregunta en un tono que no pude descifrar, aún me daba vuelta todo.

-Divertida, estuve bien acompaña entonces si disfrute - Sonreí al recodar como Eliza bailaba en la mesa de la barra y todos la festejábamos.

Ella me mira con el ceño fruncido por el espejo retrovisor.

-No sabía que ya hubiese llegado - Decidí hablar.

-Ah si, llegué ayer en la tarde tenía un evento en la alcaldía - Dice sin importancia.

-Qué bueno - Murmuré.

La mamá de mi mejor amiga Donde viven las historias. Descúbrelo ahora