Luego de ese momento, ambos hombres decidieron separarse y al pasar unos minutos el mayor acercó su mano cuidadosamente a la cara del menor para quitar una lágrima que caía por su mejilla y sonrió, obteniendo una sonrisa de vuelta.
- Será mejor que entremos, ya se está haciendo tarde y debemos cenar. Mañana debo hacer algunos asuntos del reino ¿Te molesta si lo pasas con los niños?-. Preguntó Bowser tomando la mano del menor para ayudarlo a bajar los dos escalones de la terraza, quien aceptó la ayuda sin rechistar.
- Para nada, es un agrado poder pasar con ellos. -. Dijo el de verde, caminando a un lado de Bowser y siendo guiado hasta la puerta de entrada.
- Me alegra saber que te lleves bien con ellos, normalmente tratan mal a los invitados incluso a Peach solían hacerle bromas y molestarla, pero contigo han sido muy buenos ¿No te han hecho ninguna broma ,cierto?
- Nada de nada, fui yo quien les hizo sentir mal con mi comentario, ellos han sido unos niños extraordinarios-. Explicó Luigi algo apenado.
- Tranquilo, eso ya pasó. Si te sigues torturando con lo que pasó, no podras disfrutar lo que sucede ahora en el momento, al menos eso dice mi terapeuta -. Dijo Bowser entrando al castillo y viendo como Luigi sonreía siguiéndole desde atrás.
- Sí, tienes razón. ¿Puedo preguntarte algo privado? Esta bien si no quieres responder, lo entiendo perfectamente -. Dijo Luigi un poco avergonzado, pero Bowser solo rió suavemente para caminar por los pasillos junto al menor.
- Pregunta y veré si puedo responder.
- Bueno ¿Tu terapeuta es alguien de acá? Me refiero de tus trabajadores o si es alguien de tu reino o de afuera-. Preguntó nervioso Luigi, a lo que el mayor respondió calmado y sin problemas.
- Es de acá, quizas le hayas visto, se llama Kammy y es la más sabia entre mis más leales trabajadores. ¿Porqué preguntas?
- ¿Crees que pueda ayudarme? Es que... No lo sé, quizás sería mejor hablar con alguien que sepa de psicología y así no te abrumo con mis problemas, para no molestarte-. Habló Luigi caminando mirando al suelo, pero levantó la mirada al escuchar las palabras del rey koopa.
- No me molestas, Luigi. Jamás pienses que lo haces, porque para nada lo haces, es agradable tener tu compañía y si puedo ayudarte de alguna forma, lo haré. Soy un villano, no un monstruo.
- Eres más que un villano, Bowser, eres un ser increíble -. Habló Luigi mirando al nombrado con una sonrisa, quien rió nervioso.
- Quizás tengas razón, el punto es que no me molesta escucharte, por el contrario me alegra saber que confías en mí para hablar de temas que te acomplejan. Aún así, si quieres que Kammy te ayude y estar en terapia, claro que le diré si te ayuda con eso, quiero que de ahora en adelante te sientas bien ¿Entendido?-. Preguntó el hombre tortuga, recibiendo una sonrisa calida del menor junto a un asentimiento.
Y así comenzó la nueva vida de Luigi ahora viviendo con la familia koopa, al principio fue un poco extraño e incómodo vivir con quiénes antes eran sus enemigos, pero después del primer mes agarró confianza y hasta se sentía en casa estando en ese castillo. Los niños lo querían tanto como a su padre, le ayudaban con las cosas del aseo y él les ayudaba con sus tareas, jugaban juntos, paseaban por el reino y hasta salía de compras con Bowser, haciéndole esta tarea mucho más fácil y agradable que antes. Estuvo tres meses en terapia, ya estaba por cumplir su cuarto mes y había logrado cambiar bastante a cuando Bowser lo había encontrado en ese arrollo a punto de terminar con su vida, ahora se veía más alegre, más libre y sobre todo con más amor hacia él mismo.
Y aqui estaba ahora en una de sus sesiones privadas en la sala donde solían hacer las sesiones, Luigi miraba un tanto nervioso a la koopa con gorro y vestido rosado por esa nueva sesión donde tenía nuevas cosas por contar, entre ellas una que le aterraba decir, pero no sabía a quien más contarle y en esos tres meses sabía que ella era la que indicada para ayudarle y la que menos le juzgaría, o por lo menos eso esperaba.
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Eres Importante -Bowuigi
FanficCuándo algo malo ocurría, Luigi siempre acudía a su hermano y este solía ayudarle con su problema, pero desde que Mario empezó a fijarse más en la princesa, Luigi dejo de pedirle ayuda. Una sola noticia fue suficiente para saber que él ya no debía e...