Deudas y deudas era la palabra que se repetía en esa fría y oscura habitación un hombre miraba preocupado una hoja en sus manos y a la vez temblaba sabía que tal vez este era su último día en la tierra y no quería dejar a sus hijas solas pero que podía hacer? Tenia una deuda muy grande que solo se podía pagar con la muerte o con millones de pesos.
-¿Entonces Alejandro? ¡El dinero o te mueres!-Dice un hombre alto moreno claro con un cigarrillo en la boca, inhalaba y soplaba el humo a la cara del hombre sentado- ¿Alejandro?
-Yo tratare de conseguir el dinero pero deme una sola oportunidad le prometo no defraudarlo-El hombre casi lloraba por lo desesperado que estaba.
-¡Sabes cuántos idiotas me han dicho eso! Miles y miles que he matado con esto que vez en la mesa-Dice el hombre apuntando a una pistola dorada que estaba cargada-Podria descargarla en tu cabeza en este momento pero está bien te dare solo 48 horas.
Los ojos del hombre se illuminan y daba las gracias muchas veces, el hombre solo rueda los ojos y lo deja libre.
El hombre se dirige corriendo a las calles de la ciudad hasta llegar a un pequeño café.
-Hija ya has trabajado demasiado vete a descansar yo me haré cargo-Le dice a una joven mientras limpiaba las mesas del café.
-Papá sabes que necesitamos el dinero Sofi ha estado muy enferma y sus medicamentos son muy caros.
-Lo se hija los medicamentos de tus hermana son muy costosos pero su leucemia empeora cada día más- Alejandro comienza a llorar por su desesperación al no tener dinero para los medicamentos de su hija y para pagar la deuda tan grande que tiene-Trato de buscar soluciones pero no las encuentro si tan solo Sinu estuviera aquí...
-Ey tranquilo papá se que mi mamá desde el cielo está orgullosa de ti por ser un gran padre y sacarnos adelante.
-Eres tan linda hija mia igual a tu madre.
Padre e hija se dan un fuerte abrazo y después cierran el café para irse a su casa, era un día lluvioso y no tardó en caer un par de gotas ambos se apresuraron y al llegar una pequeña niña miraba la televisión.
-Hola mi pequeña princesa- Dice la hermana mayor dándole un abrazo y un beso en la mejilla.
-Hola kaki los extrañe mucho hasta cuándo podré ir a trabajar contigo.
-Hasta que mejores hija mientras tanto tu debes de reposar y nosotros consentirte mucho-Dice el padre dándole un abrazo a su hija.
Sofia es una pequeña de 6 años con leucemia su familia ha echo todo lo posible por qué salga adelante sus medicamentos son muy costos lo que ha provocado que su hermana no estudiará la universidad y solo se dedicada al trabajo de la cafetería.
Solian ser una familia con estabilidad económica estable pero su padre callo en quiebra y su madre enfermo gastaron todo su dinero en tratamientos para poder salvarla, tristemente no funcionó y tiempo después la pequeña Sofia enfermo, eran tiempos muy dificiles para la familia.
-Ya acosté a Sofi y ya tomo sus medicamentos mañana yo la llevare al doctor no te preocupes papá.
-Gracias hija eres una gran persona.
Camila llevo a su hermana a la clínica para una revisión, nerviosamente estaba en la sala de espera mientras esperaba a su hermana.
-Familiares de Sofía Cabello- Dice un doctor con una tabla de hojas en la mano.
-Soy yo, cómo está mi hermana.
-Señorita tengo que serle sincero.
-Digame por favor.
-Los medicamentos no están funcionando la leucemia de Sofía es cada vez más avanzada y solo nos queda probar otro tratamiento pero sería más costoso-Dice el doctor.
-¿Mas costoso? Pero si apenas podemos pagar este tratamiento sería más complicado conseguir el dinero.
-Si fuera por mi créame que no le cobraria señorita, solo queda esperar un milagro.
-¿En dónde está mi hermana?
-Esta en la habitación 60 debe dejarla aqui su estado de salud no es bueno y no es recomendable que se la lleven.
-Bueno está bien, gracias doctor.
El doctor asiente y Camila derrama lágrimas de tristeza, cómo es posible que su pequeña hermana esté pasando por todo esto, si tan solo tuviera una solución a su problema la tomaría sin pensarlo dos veces con tal de ver a su hermana corriendo y jugando como lo solía hacer antes.
Camila sube hasta llegar a la habitación de su hermana y antes de entrar derrama un par de lágrimas más y después las limpia rápidamente, al entrar ve a su hermana recostada en una cama jugando con un oso de peluche.
-Hola mi princesa.
-Hola kaki estoy aburrida quiero ir a casa ¿ya nos podemos ir?
-No podemos llevarte a casa no por el momento los doctores quieren hacerte más pruebas para que te mejores muy muy pronto.
-Pero quiero estar contigo y con papá.
Camila no contiene más las lágrimas y llora, rápidamente abraza a su hermana y le da un beso en la cabeza.
-Te prometo que te visitaré cada vez que pueda, solo prometeme que serás muy fuerte y le echaras muchas ganas.
-Te lo prometo le echaré muchas ganas.
-Le llamaré a papa para que venga a cuidarte ¿si?
La pequeña asiente y Camila llama a su papá para que venga a cuidar a su hermana, después de que llega Camila sale del hospital para ir a su casa a descansar un poco pero al cruzar la calle una camioneta se interpone en su camino, dos hombres de bajan y tapan su boca y nariz haciendo que se desmaye.
Poco a poco Camila habré los ojos y se encuentra acostada en una cómoda cama.
-¿Hola? ¡Hay alguien aqui!
Desesperadamente empieza a tocar la puerta por dentro con la esperanza de que alguien le abra pero no hay respuesta.
Mierda. En qué estoy metida ahora.
De pronto la puerta se abre y entra una mujer alta y joven como de 24 años traia un maletin en sus manos.
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Casada con la Jefa de la mafia.
Fiksi PenggemarCamila o Mila como todos la conocen es una joven de 17 años que se encuentra en una situación muy difícil al estar su hermana de 6 años enferma de leucemia y su padre con una gran deuda, una mujer aparece de la nada ofreciendo su ayuda solo con una...