Tóxico
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JiEun caminaba por los pasillos del hospital, buscaba con su mirada dentro de las habitaciones, buscaba a alguien en específico, había oído que estaba en el hospital por algunas lesiones, quería saber si estaba bien.
En un pequeño descuido tropezó con una persona.
- Oh, lo siento mucho. - Alzó la mirada y encontró a un muchacho de muy buen aspecto, alto y medio pelirrojo, más bien un castaño rojizo, tenía un doble párpado perfecto.
- Perdón... - JiEun se hizo hacia un lado y el muchacho volvió a disculparse, con una notoria preocupación que no se le iba del rostro.
Algo en la chica lo hizo seguirlo, no porque estuviera interesada en el, si no de a dónde iba.
Ambos llegaron una de las habitaciones donde encontraron a su objetivo.
- ¡Chu DakHo! - Dijeron ambos al unísono y se miraron con algo de confusión.
- ¿Quién es usted, señorita?
- Fui una paciente suya, me ayudó mucho en el hospital psiquiátrico.
- Oh, comprendo...
- ¿Y usted?
- Un amigo... - Se oyó algo inseguro, luego entró a la habitación.
DakHo se encontraba descansando plácidamente. Tenía un desgarramiento interno así que sus heridas debían cicatrizar. Además de que su cuerpo se sentía cansado.
- Mierda... Por qué no me llamaste... - Se quejó el muchacho.
JiEun se hizo a un lado y observó los moretones en el cuello de DakHo. Ni siquiera ella sabía lo que había pasado, no tenía idea de que MoonJo lo había atacado. Y el otro muchacho no sabia nada aparte de haberse enterado por algunos contactos sobre la noticia donde se vio envuelta DakHo y los crímenes que le inculparon.
- ¿Cómo te llamas?
- Anthony... ¿Y tú?
- JiEun. Un gusto.
- Sí... Uh... ¿Sabes algo?
- Sólo que está dentro de un caso. Trabaja ayudando a una oficial de policía... Probablemente se metió en peligro, ya le habían hecho daño estando en la cárcel por un tiempo. La gente lo odia por ser diferente.
Anthony suspiró, acariciando los cortos cabellos de DakHo.
- ¿Se cortó el cabello?
- Se lo cortaron.
- Tiene más sentido. Él adora su cabello...
- Es bastante único. Amable y simpático... Aunque últimamente ha estado muy cansado y hasta callado...
- ¿Por qué siempre te metes en los problemas de otra gente?... eres un tonto... - Regañó Anthony, dándole un golpe con el dedo en la frente, viendo L contrario fruncir el ceño mientras dormía. Eso lo hizo sonreír un poco.
- ¿Ya oíste sobre el caso?
- Sí...
- ¿Y no te asusta haber vuelto?
- Me asusta más que algo le pase a la persona más importante de mi vida...
JiEun ladeó su cabeza con algo de ternura.
- Eso... es lindo... - Desvió la mirada - Quizás... debí haber sido así con JongWoo... - Susurró para sí misma - ¿Hubiera cambiado algo?.... - Se volvió hacia Anthony - Estará bien.
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Tóxico
Hayran KurguHobbes plantea que somos malos por naturaleza, y que por esa razón deben haber leyes que nos controlen, pero, ¿para qué? Si la verdadera libertad es lo que mueve las emociones dentro de ti, y para mí, es lo que está mal lo que enciende la brasa de m...