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17 de mayo de 2022
📍Mónaco

Dos días habían pasado, dos días en lo que Madelyn no salía de la habitación, preocupando a Lando y a Daniel

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Dos días habían pasado, dos días en lo que Madelyn no salía de la habitación, preocupando a Lando y a Daniel.

-Lyn por favor, ábreme- suplicó Lando que se encontraba a fuera de la habitación.

-Estoy bien pequeño, solo necesito descansar- decía ella.

-Daniel ha ido a por comida para ti.

-No es necesario.

-¿Nada todavía?- pregunto Daniel que traía en sus manos una bandeja llena de comida.

-No hay manera de que abra.

-Lyn, soy Daniel- dijo el causando una pequeña risa en Madelyn que fue escuchado por ambos pilotos haciendo que se mirasen con una sonrisa.

-Ya lo se Daniel, reconozco tu voz.

-No me digas esas cosas, que al final pienso que te gusto- dijo el divertido.

-¿Que has traído de comer?- pregunto ella cerca de la puerta.

-Dos hamburguesas de pollo y bolitas de queso- respondió el.

-¿Hay patatas?

-Si, pero tienes que abrir la puerta, que si no me las voy a comer- ambos compañeros de equipo se miraron sorprendidos cuando Madelyn abrió la puerta.

Lando en cuanto la vio, fue a abrazarla fuertemente y cuando se separó de ella dejó un beso en su frente.

-Mi pequeño ángel, ¿como es posible que te veas así de guapa después de estos dos días?- pregunto el haciendo que la Leclerc se sonrojara- Oh ¿te sonrojaste?

-No y deja de mirarme así o al final voy a pensar que te gusto- dijo ella recordando lo que había dicho el australiano minutos atrás.

-No lo pienses tanto, me gustas- dijo él, dejando sin palabras a Madelyn- Ahora, ¿prefieres comer en tu habitación o en el jardín?

-En el jardín.

-Genial, vamos que te ayudo a bajar- dijo Lando entrelazando su brazo con el de Madelyn.

-Lando, puedo bajar yo sola.

-Me da igual, busque en internet síntomas de una embarazada de siete meses y ponía que los más típicos era el dolor de espalda, cansancio y agotamiento- explicó el- Además seguro que si Daniel es el que te hubiera ayudado no le habrías dicho nada.

Madelyn ignoró lo dicho por el británico y se sentó en la mesa que había fuera del jardín, enfrente suya se sentó Daniel que le regaló una sonrisa y a su izquierda se sentó Lando.

-¿Hacemos algo por la tarde?- pregunto Daniel cuando empezaron a comer.

-Podemos ir a comprar ropa para la bebe- dijo Lando ilusionado.

MOM || Daniel RicciardoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora