¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Una foto te dura más.
-Idiota.
-¿No puedes dormir?
-No, es que, ¿Estas seguro de querer anunciarlo? No quiero que te metas en problemas- dijo Madelyn girándose en la cama, para poder mirar al piloto.
-Lo estoy, además así tendremos tiempo de planear nuestra boda- respondió Daniel, acercando a Lyn a él.
-Hablando de eso, no quiero una boda muy grande, quiero algo íntimo, solo nosotros y nuestras familias.
-Yo igual, pero con toda la familia que se supone que tenemos, la boda al final si va a ser grande- aseguró Ricciardo divertido, dándole un beso a la monegasca.
-¡Hoy cumple un mes mi princesa!- gritó George abriendo la puerta del cuarto, asustando a la pareja- A levantarse, que hoy hay que celebrar.
-¡George! Has despertado a Sophie- regaño Madelyn cuando escuchó a su hija llorar.
-Perdón mami, yo me encargo- dijo el británico acercándose a la bebe, para cargarla y llevársela- Os quiero en diez minutos abajo, Carmen y yo vestiremos a Sophie.
-¿Por que sigue en esta casa?
-¡Te escuche Ricciardo!
-¡Pues ya sabes que hacer!
-Deja de gritar Daniel- dijo Madelyn, siendo ignorada por el.
-¡¿El que?!
-¡Irte de aquí!
-¡Daniel!
-Pero no grites mujer- exclamo ahora el australiano, ganándose un golpe de Madelyn.
-Me da a mi, que al final no hay boda- dijo George divertido, que había vuelto al cuarto a por el chupete de Sophie.
-Desaparece de mi vista niño.
-Oblígame.
-Los dos, fuera- ordenó Madelyn.
-Pero me tengo que cambiar.
-Fuera.
-¿Ves lo que haces?- pregunto Daniel cuando Madelyn les cerró la puerta en la cara.
