─ ¡Yo primero! ─gritó cierto Haitani ingresando a la habitación.Ran se dió la vuelta para ver a su hermano que caminaba hacia ellos para ver mejor a la pequeña bebé que estaba tomando de la leche del pecho de su madre.
─ Definitivamente es una Haitani ─habló Rindō─ Mira esos ojos, saco los hermosos ojos del tío Rindō ─.
Ran ante frunció el entrecejo, su hermano tomó la pequeña mano de la bebé y le dió suaves caricias, Reiko por su parte renegaba cuando sintió que alguien más que no sea su papá o su mamá la tocaba.
─ Buen trabajo Aoi, tiene más tu apariencia eso es tranquilo ─siguió bromeando su cuñado.
─ Bueno Amy te llama así que debes irte ─dijo su hermano señalando la puerta.
Rin rió con más fuerza y se alejó para después salir de la habitación, Ran giró hacia Aoi que estaba a punto de dormirse pero se mantenía para poder alimentar su hija hasta quedar satisfecha.
─ Dámela, deberías descansar ─le dijo Ran.
─ Espera quiero tenerla en mis brazos todavía ─contestó con la voz cansada.
─ Duerme un poco además aquí está su cuna, estará todo el día aquí contigo ─responde.
Aoi solo asintió y le dió a la pequeña criatura, Ran con cuidado la tomó entre sus brazos y le dió un beso en la frente para después dejarla en aquella cuna, miró a Aoi y está ya estaba dormida así que solo se sentó en el sillón así quedando dormido el también.
Tres días después Aoi tuvo su alta y salió del hospital junto a Ran y su pequeña bebé, los demás acordaron esperarlos en la mansión y hacerle una pequeña bienvenida tanto a la madre como a Reiko. Ran abrió la puerta del copiloto y con cuidado hizo ingresar a Aoi, el subió a su lado y encendió el coche dirigiendo finalmente a casa.
─ ¿Cómo está mi pequeña? ─preguntó Ran con una leve sonrisa sin despegar su vista del camino.
─ Es muy dormilona ─dice Aoi mientras la veía─ Recién despertó pero ahora está durmiendo otra vez ─.
─ Reforzaremos la seguridad en la casa ─dijo Ran─ Hasta que Rei por lo menos tenga 10 años ─.
─ Tienes razón, hablaré con mis hombres ─dice Aoi.
Al llegar a la mansión se dieron cuenta que ya estaban todos por los autos y motocicletas que llenaban el estacionamiento, Aoi bajo y camino hacia la puerta con Ran detrás de ella, al abrirse la puerta todos los veían con una sonrisa.
─ ¡Bienvenidos! ─.
─ Primero quiero ver a la nena ─dice Baji con una gran sonrisa─ Pero si es una belleza, nada comparado con el papá ─.
Ran lo miró con furia.
─ ¿Quieres morir otra vez pelos?.Baji le saco el dedo del medio y fue a sentarse en el sofá junto a Draken y Mikey, todos llegaron con pequeños obsequios tanto como para la niña como para Aoi.
─ Mi bebé tiene a todo el mundo a sus pies, no necesita de nada más ─dijo con orgullo mientras cargaba a su bebé.
─ ¡Ran, no seas grosero! ─dijo Aoi golpeando su espalda.
Ran solamente rió al escuchar a los demás quejarse y discutiendo de quién tenía el mejor regalo para Rei. Aoi por su parte notó que la pequeña comenzaría a llorar por las otras voces así que le quitó con cuidado de los brazos de su padre.
─ Iré a dormirla ─dice mientras sube las escaleras.
─ Iré contigo ─dijo Yuzuha siguiendola.
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DIVINA DESTRUCCIÓN | RAN HAITANI
РазноеLuego de 10 años de la sentencia dictada y ella quedará en prisión. Aoi se convierte en la actual y gran líder de la mafia más poderosa de Japón, siendo así temida por varias pequeñas organizaciones. Y está dispuesta a usar de ese poder para poder v...