INMORAL 狼; HOPEV

VIGÉSIMO TERCER ACTO

Hay muchas razones por las que te sorprenda recibir esta carta mía. No hay motivos suficientes para que yo quisiera hablar contigo, no obstante, por todo lo que ha sucedido entre nosotros y la forma en la que me hice partícipe de tu más grande secreto, creo que comparto la obligación de escribirte de nuevo.

Esto no significa que te haya perdonado. Y no por eso quise hacer esta atrocidad que me carcome el alma. Taehyung, en ningún momento el concepto de venganza ha cruzado por mi mente y corazón, pero las cosas han salido terriblemente mal y en mis defectos está el simple hecho de ser un débil omega capaz de someterse a la Voz de cualquier alfa y en especial, la de tu padre.

Es difícil confesar que te he traicionado. Creí estar seguro que lo que había entre  ustedes dos me lo llevaría a la tumba,porque no es algo que me corresponda ni me gustaría divulgar por cuenta propia; pero dentro de tantas posibilidades, no preví esa que involucrara a tu padre y su visita a casa, exigiendo todas las explicaciones que no has querido obsequiarle correctamente. Entre tanto ajetreo, con mi presencia mandada a llamar, mis padres decidieron ponerse de su lado e intentar arreglar una nueva unión entre nosotros. No creí que mi negativa fuera el detonante de todo este desastre desatado. Su abrumadora insistencia me hizo soltar una verdad a medias que ahora parece una avalancha aproximándose a ti. Yo solo les dije que estaba decidido a casarme solo si ese alfa no eras tú y tuve que aceptar que la razón por la que me negaba tan rotundamente era porque tú también habías hecho una elección.

El conocimiento de la posible relación que sostienes con alguien mas los dejó locos. No hay un tipo de racionamiento en sus palabras. Estoy horrorizado, Taehyung. No dejaron de interesarse con los detalles, pero tenía suficiente con todo y no pudieron hacer que les dijera nada más que el nombre de Hoseok. Las condiciones de tu inusual relación aún quedan guardadas bajó un ataúd en mi memoria, y eso, quizás, te otorgue una ventaja sobre esos lobos que parecen querer asesinarlos a los dos.

Taehyung, se muy poco sobre el tema, pero es obvio que ahora mismo lo están buscando y aunque tardaran un poco en poder seguirle el rastro, terminaran por averiguar que el omega Jung Hoseok, hijo de unos nobles extranjeros que participó con nosotros en las actividades del club como nuestro asistente general, no existe.

Deseo con toda la fuerza que alberga mi alma, que esta carta llegue a tiempo y te permita evitar la furia con la que tu padre va en camino a Halfenaked. Cuídate Taehyung y, si dices querer tanto a Jung como me aseguraste, no le permitas vivir el infierno en el que nacimos.

Con esperanza, un reciente y muy valiente vigía, Park Jimin.

( メ )

—Piénsalo bien, este es el momento. Nadie lo sospecha. Tardarán en saber dónde buscarnos.

Con la lavandería a oscuras, Taehyung le susurró sus posibles escapes a un costado, tumbado en el suelo al igual que él. Las opciones eran tan temerarias como él, casi sin conciencia. Y Hoseok lo escuchó como siempre, atento, para ese punto de la noche, adormilado.

—Lo van a descubrir ¿y qué haremos cuando lo sepan?

—¿A quién va a importarle para entonces? Ya estaremos lo suficientemente lejos.

Hoseok no contestó. Se quedó considerando tentativamente la idea, sin aire, sin saber si le atraía tanto como le disgustaba parecer un cobarde; porque irse con Taehyung, casi en términos de rapto, le parecía una desesperada acción derivada de su evidente debilidad que golpeaba duramente su orgullo, pero ¿qué otra cosa podía hacer? si enfrentarse al padre de Taehyung sonaba, en todo caso, como un suicido con todas las de perder. ¿Y qué le diría con exactitud? Sí sería evidente que sus intenciones al querer a Taehyung como su compañero, para toda la vida, y si existiera la posibilidad, eternamente, nunca serían comprendidas. Mucho menos aceptadas.