Juicio Biológico || ChanSoo[Terminada]

Capítulo Veinticuatro

Había recibido el regaño de su vida, como si él hubiese pedido que el celo le llegará de repente. Era una estupidez, y ahora realmente extrañaba poder quejarse con Kyungsoo para hablar mal de su estúpido jefe por horas dentro de la oficina. Claro, no se arrepentía. Ahora tenía una bonita marca de dientes en su nuca, y tal vez diez años más de vida por la felicidad que inundaba cada partecita de su cuerpo.

—Entonces, ¿me dices que el idiota de tu jefe te regaño por el celo? —Junmyeon asintió, Sehun se cruzó de brazos y arrugo las cejas. —¡Es un maldito! —Gritó enojado sin importarle que las personas dentro de la cafetería lo escuchasen.

Algo que odiaba en exceso Sehun eran aquellos empleadores que creían que podían pisotear a sus trabajadores solo por un cargo escrito en papel y un ridículo gafete sobre la mesa. No señor, la forma correcta de tratar con personal era darles la confianza de que eran iguales. No había hecho un curso sobre inteligencia emocional en vano.

—Cariño, está bien... Solo olvidemos eso. Ese señor se suele poner así y al rato se le pasa. —Junmyeon estiro su mano para rozar con la punta de sus dedos las piernas de Sehun, pero el alfa continúo negando totalmente molesto.

—Amor, es que las cosas no son así. Hubiese entendido que te hiciera un llamado de atención por no avisar que estabas en celo, ese asunto está aclarado. Pero no lo hizo, te estuvo regañando por dos horas seguidas. ¿Productividad? Es un idiota, sabe más sobre productividad mis pelotas que ese viejo decrepito. Si en vez de hacer que perdieras el tiempo maltratándote verbalmente te hubiese dado las pautas correctas para que desempeñaras un mejor trabajo estoy más que seguro que habrías avanzado en la demanda. Estoy enojado Junmy, estoy irritado porque esa no es la manera de reprender a alguien y me pone de peor humor porque eres mi omega, mi pareja, mi futuro esposo y no tienes que estar intentando esconder lo que sientes. ¡Yo lo siento también!

Junmyeon se quedó en silencio escuchando a Sehun, era la primera vez en todo el tiempo que lo llevaba conociendo que le escuchaba usando tal lenguaje o incluso con esa aura tan peligrosa (quitando la rabieta que hizo con los ruidos de Jongin o el pago de la pared anti-ruidos), claramente sabía que su alfa era un hombre hecho en todos los significados de la palabra, pero le llenaba de emoción. Era como una señal telepática que le indicaba múltiples veces que había elegido correctamente a su pareja.

Sehun dejo de golpetear su pie sobre el suelo y sonrió fugazmente, los dos se miraron directamente a los ojos para luego solo reír. Junmyeon seguía olvidando que ahora era como un libro abierto ante su pareja, y Sehun seguía olvidando que el aroma de su omega le traía completa paz. Eran tontos, y ellos lo sabían más que nadie.

—Está bien amor, tienes toda la razón del mundo. No es forma de que alguien trate a otra persona, pero hay que entender que Kyungsoo ha usado eso varias veces en corto tiempo. Supongo que pensaba que yo le estaba mintiendo. —Sehun tensiono la mandíbula, por fin libero sus brazos para poder tocar de vuelta la mano de Junmyeon.

—Kyungsoo y tú son diferentes, ese viejo no tiene porque siquiera compararlos. Que sean omegas no significa que los dos tendrán un funcionamiento del cuerpo similar, es una idiotez...— Junmyeon le sonrió a Sehun. —¿Has pensado dejar de trabajar en ese sitio? Es decir, si no quieres trabajar conmigo y con Chanyeol lo puedo entender... pero eres lo suficientemente capaz como para crear tu propia oficina, trabajar a tu propio ritmo.

—Amor, crear una oficina es algo para lo cual necesitaría mucho dinero. Y bien, supongamos que puedo obtener el dinero por préstamos bancarios o lo que sea... el reconocimiento no lo obtendré de la noche a la mañana. Mi vida, mínimo se necesita un año para recuperar la inversión, clases de economía de primer año. —Junmyeon alejo la mano para poder comer lentamente su pastel de vainilla con arándanos, Sehun sorbió de su chocolate caliente. — Y no me molesta la idea de trabajar contigo y con Chanyeol, enserio ustedes dos son excelentes abogados. Pero me sentiría como la tercera rueda de la bicicleta.