Capítulo 30: ¿No me creés? (1T)

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Se sentó en la silla y no esperé que me pregunte nada, simplemente solté todo:

- ¿Por qué no me dijiste ayer que iba a estar Mandinha? -vi cómo rápidamente se tensó-

- Porque no sabía bien quiénes iban ¿qué iba a hacer? ¿Mandarte un mensaje en el momento y decirte "che vino mi ex"?

- ¿Estás seguro de que es tu ex?

- ¿¿Qué?? -preguntó sorprendido e indignado-

- Te hice una pregunta.

- ¡Obvio que estoy seguro! ¿Qué decís?

- No, te pregunto porque yo con mis ex no me pongo a bailar como estaban ustedes dos, ni en joda -vi cómo sus ojos se abrieron y su cuerpo se tensó más, mientras tragaba saliva-.

- ¿Qué...?

- No te hagas el boludo -lo corté-. Sabés muy bien de lo que hablo -lo vi bajar la mirada, mientras empezaba a mover su pierna por la ansiedad-

- Sí, ya sé -soltó entre dientes-, aunque sí lo hiciste.

- ¿¿Eh??

- ¿Te tengo que recordar la fiesta de fin de año de la agencia? -me quedé muda- Sí estabas pegada a tu ex, tanto que te lo chapaste...

- ¿¿Esta es tu forma de decirme que te chapaste a tu ex??

- ¡No! -saltó preocupado- ¡Ni ahí!

- ¿Entonces para qué lo mencionás? Si fue así, fue hace mucho y estaba SOLTERA -dije enfatizando-.

- Ya sé, tenés razón en eso -volvió a bajar la mirada con culpa-. Pero no es como creés -yo solté una risa sarcástica-.

- Seguro que no. Es lo que siempre dice el que se manda una cagada...

- Es lo que vos me has dicho -me cortó-. Y yo te creí. Así que dejame que te explique y después sacás las conjeturas que quieras, ¿sí? -no le contesté, sólo me apoyé sobre la silla, cruzada de brazos- No sabía que Amanda iba a estar allá. Hice mi mejor esfuerzo para no darle importancia, cosa que sirvió porque nos pudimos volver a llevar bien, que era la idea -yo revoleé los ojos-. Te recuerdo compartimos amistades de muchos años.

- Qué excusa más cómoda te quedó... -dije mordiéndome el labio-

- Dejame terminar -me interumpió molesto-. No es excusa, es la verdad, intuyo que te habrá pasado con tu primer ex, si vos hasta lo llevaste de cita a un evento laboral -tenía razón-. Yo ni lo busqué, es algo que puede pasar, y no quedamos en malos términos como para decirles a mis amigos que elijan entre uno u otro. Sí te reconozco que estuvo más "amigable" de lo normal toda la noche, pero no me di cuenta hasta el boliche, te lo juro.

- ¿Perdón, cuándo llega la parte donde me explicás qué hacías prácticamente apoyándola mientras bailaban? -yo ya estaba harta-

- No digas boludeces, ni en pedo la estaba apoyando.

- En pedo o no, los vi, Emiliano ¿a vos no te jodería que baile así con alguien en un boliche? ¿¿Especialmente con un ex??

- ¡Obvio que me jodería! Pero vos lo dijiste: que vos le bailes a alguien. ELLA me bailó a mí -dijo focalizando el "ella"-. Te concedo que estaba muy en pedo y no me fui a otro lado, como debería haber hecho, te pido perdón por eso. Pero en el momento en que me di cuenta, la agarré y hablé con ella. Le dije que ella sabía que yo estaba con alguien más y que entre ella y yo no iba a pasar más nada.

- Claro...

- ¿No me creés?

- ¡Obvio que no, Emiliano! Nunca histeriquearía estando de novia, ni con un ex, ni con nadie -en ese momento levantó sus cejas-.

Estrella de mar - Emiliano "Dibu" Martínez [𝓣𝓮𝓻𝓶𝓲𝓷𝓪𝓭𝓪]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora