Mi Esposo Es Un Billonario (Parte 1)

Capítulo 163

Ethan tomó la mano de Janet y la guio hacia abajo.

Su pene ya estaba duro como una roca y palpitante.

Aunque Janet se había acostado con Ethan muchas veces, no podía evitar maravillarse con su tamaño en cada ocasión.

Ella agarró con firmeza y suavidad su miembro caliente.

Como Ethan estaba ocupado chupando su pezón, su tacto lo tomó por sorpresa. Frunció el ceño ligeramente, con ojos rebosantes de lujuria, y dejó escapar un gemido ahogado.

"Mueve tu mano arriba y abajo", ordenó él mientras sostenía la mano de Janet, guiándola.

Su cara estaba enterrada entre sus pechos cuando las manos de ella frotaron su pene, lo cual provocó que gimiese con mayor intensidad.

Ethan estiró los dedos para deslizarlos bajo su vestido. Las yemas de sus dedos se frotaron contra los labios a través del delgado material de sus bragas. Levantó las piernas al notar que su ropa interior se humedecía, momento en el que él le quitó el vestido y lo arrojó de la cama, junto con su ropa interior.

Janet gimió. Estaba muy sensible e inclinó sus caderas hacia él con pasión sin dejar de gemir.

Ethan levantó la mano frente a ella para que pudiese contemplar el líquido acuoso en la punta de sus dedos. "Te mojaste bastante rápido, cariño".

Él tomó su barbilla para meter la lengua en la boca con un apasionado beso.

Janet respondió a su beso con timidez y apretando las piernas.

Ethan le mordisqueó la clavícula, el pecho, el ombligo y finalmente, su lugar secreto entre las piernas. Podía ver claramente lo mojada que se encontraba.

Cuando sus dedos se enredaron entre el cabello de Ethan, Janet miró hacia el techo y jadeó. Podía sentir claramente la punta de la lengua de Ethan succionando y moviéndose; el aire caliente de su aliento acariciaba suavemente sus muslos, lo que la hacía temblar.

Él frotó su pene erecto contra la vagina de Janet, antes de penetrarla profundamente.

Ella se mordió el labio inferior y gimió.

Ethan hizo una pausa de dos segundos, puso las piernas de ella sobre sus hombros y empujó lentamente todo el miembro dentro de su esposa.

"Mmm... Cariño...". De repente, Janet sintió un dolor en la parte inferior del abdomen, por lo que levantó la cabeza y jadeó.

El dolor fue reemplazado gradualmente por excitación.

El sudor goteaba desde la nariz de Ethan, y sus músculos se marcaban bajo la luz. El feroz choque de sus cuerpos incrementó el sudor que resbalaba por su espalda.

Después de hacer el amor en esa posición durante un rato, Ethan tomó en brazos a Janet para sentarla sobre su regazo.

Las mejillas de Janet se encendieron, pero continuó gimiendo de placer.

La nueva postura los unía aún más mientras su pene parecía aumentar de tamaño dentro de ella.

"¿Sabes qué te haría sentir mejor?". Ethan se incorporó, le rodeó la cintura con los brazos e inclinó la espalda para chupar su pezón.

Ethan gruñó con voz ronca cuando Janet comenzó a mover las caderas encima de él.

Sabía muy bien lo que hacía. Ethan se sentía muy cómodo en su apretado interior sin dejar de besar el cuello y clavícula de Janet, mientras ella se movía arriba y abajo. "Bebé...".

Continuaron haciendo el amor bañados por la luz del sol que se colaba por la ventana, y no se detuvieron hasta que la luna ya había ocupado su lugar en el cielo nocturno...