Las leyes de la creación están escritas por el destino de la luna. Destinos tan sencillos como que los Alfas sienten atracción por los aromas dulces de los Omegas y estos por los fuertes de los Alfas. Pero como todo en esta vida existen las excepcio...
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Bajando del coche de TaeHyung, JungKook crujió su cuello por costumbre y rodó sus hombros. Era una vieja costumbre que adoptó por hacer cada vez que una carrera era próxima y tenía que entrenar o hablar de tácticas de la misma. Ante ellos se encontraba el garaje de Stray Kids y las voces masculinas se escuchaban mezcladas con la música de la radio.
Aquel día era la reunión previa a la carrera final de Omelas ese año. En dos días serían, Stray Kids y Bangtan, coronados como campeones o como perdedores. El nivel de enfrentarme entre la alianza de TXT y Ateez contra la de Stray Kids y Bangtan había llegado al nivel de solo importar el primer puesto. Los demás, serían una derrota vergonzosa solo por orgullo.
JungKook volvió a rodar sus hombros mientras escuchaba a TaeHyung sacar su mochila del maletero. El mayor portaba un chándal ligero negro con una camiseta blanca que tenía manchas imborrables de grasa y aceite en ella. El cuello gastado y abierto de la camiseta mostraba la marca en su cuello, pero la fina chaqueta de chándal y su cuello la cubrían.
JungKook, por su lado, solo llevaba sus viejos vaqueros oscuros y una camiseta de manga corta negra. En sus brazos, mezclados con los tatuajes, se veían moretones de los dedos de TaeHyung. Y en su cuello, justo en la unión entre este y el hombro, resaltaba la marca recién lamida por su novio cuando aún estaban en el apartamento antes de salir.
La rotación de sus hombros se detuvieron cuando la mano callosa, pero cálida y suave a la vez, de TaeHyung se entrelazó con la suya tatuada derecha. Había abierto su chaqueta, dejando que se viera también la marca en su cuello y aquello, simple y llanamente, fortaleció el lazo compartido entre ambos.
Al entrar al garaje aún se escuchaba el jaleo, el cual fue detenido poco a poco por su llegada. La música seguía sonando de fondo y, para alivio siempre amado de TaeHyung al saberse no equivocado al escoger familia, los miembros de Stray kids fueron los primeros en volver a sus quehaceres.
-Buenos días. -Saludó JungKook recibiendo un coreado de Stray Kids.
-Tae, necesitamos ayuda con esto. -Dijo MinHo señalando cierta parte de la moto. -ChangBin y Jisung ya están trabajando con YoonGi en la chapa por arreglar.
-Pero la moto sufrió daños al rozar contra el cemento en la carrera de clasificación. -Explicó SeungMin.
-Okey, voy a ello. -TaeHyung soltó su mano, para quitarse del todo la chaqueta y dejar su mochila a un lado en el suelo. JungKook le sonrió para que supiera que estaba bien, aún si sus amigos aún no habían hablado.
-Iré a reunirme con Chan y Nam para hablar de las tácticas. -Acomodó con naturalidad un rizo fuera de la frente de TaeHyung.
-Hyung. -Escucharon a su lado, era HyunJin llamando a JungKook. -Tengo que ir en un par de horas a que me retiren la escayola. -Informó acercándose a ambos. -¿Podrías acompañarme y luego llevarme a recoger a JeongIn? No creo llegar a tiempo si alguien no me lleva.
