As de Corazones

Capítulo 6

Capítulo 6 | "Almacén"

Madison Davis

Vale, esto había sido una mala idea.

¿En qué mierda estaba pensando?

Estaba en el gimnasio de la mansión, porque ya les había dado a los chicos la ubicación de la primera propiedad y habían decidido que si quería lograr atrapar a Egor debería estar a la altura de ellos.

— ¡Arriba, barbie!

Frank, el que acaban de designar como mi guardaespaldas y profesor, me exige levantarme mientras mi cuerpo se encuentra tendido en el ring de pelea que los Blackwolf tienen en su mansión, tienen un maldito gimnasio aquí dentro.

Frank no me está dando tregua, siento el sabor metálico de la sangre en mi boca y mi cuerpo duele por el esfuerzo al hacer ejercicio sumado con los golpes que he recibido, me he acostumbrado al dolor, pero he pasado más en el suelo que de pie en este estúpido entrenamiento.

Bufo molesta incorporándome lentamente, la masa de músculos que es Frank me sonríe burlón cuando vuelve a atacarme, consiguiendo volver a impactar con mi cuerpo y enviándome al suelo, riéndose de mi lamentable espectáculo.

¿No entiende que soy principiante?

— A este paso las balas impactarán en ese bonito culo que tienes y nadie se devolverá a recoger tu lindo cadáver — exclamó Oliver, acercándose.

— Es la manera más horrible en la que me han dicho que soy linda.

— Concéntrate, Madison.

— ¡Es que no puedo! — refuté, haciendo un auténtico berrinche mientras cruzaba mis brazos — ¡Ustedes deberían protegerme! ¡¿Qué clase de secuestradores son?!

— Pues nadie lo hará, muñeca, así que anda. — dijo Kace, apareciendo tras el rubio.

Bufé molesta mientras incorporaba mi cuerpo, de nuevo, para intentar asestarle un golpe al estúpido de Frank, lo cual era una maldita tarea imposible, los hombres de los Blackwolf que se encontraban en el gimnasio no dejaban de lanzar insultos y burlas en mi dirección, consiguiendo que me distrajera lo suficiente para que Frank conectara, de nuevo, su puño en mi rostro.

Gemí de dolor cuando mi cuerpo impactó contra la lona, decidida a permanecer en el suelo si era necesario, fingiría que el golpe me había afectado lo suficiente para creer que así se apiadarían de mí.

— ¡Fuera todos! — exclamó Kace, sus hombres no necesitaron escucharlo de nuevo, desalojaron el gimnasio, vi en cámara lenta como le hizo una señal con su mano a Oliver que también desalojó el gimnasio y el pelinegro ingresó al cuadrilátero. — No te estás esforzando.

— ¿Disculpa?

— No lo estás haciendo, por eso es que están fallando.

— Ya, pues la verdad tampoco es que quería pasarme todo mi secuestro siendo golpeada por tus hombres, no era mi secuestro ideal a decir verdad.

— Madison, te estoy dando la oportunidad de saber defenderte, yo no entreno a cualquiera.

— ¿Y quién te ha dicho que esto era lo que yo quería?

— Según tu historial médico, el cual revisé, has tenido demasiadas fracturas en tu corta vida, si comparo esos datos con el padre asqueroso que tienes no me falta más que sumar dos más dos — refutó — Mis hombres han peleado con Frank y no muchos soportan uno de sus puñetazos sin quejarse mucho, lo que me indica que soportas más dolor del que tu pequeño cuerpo debería — señaló — Así que aquí estamos, te quiero dar la oportunidad de que cuando alguien venga a lanzarte un golpe de nuevo, se lo devuelvas.