Dímelo - Carlos Sainz

Epílogo

Un tiempo después.

Carlos POV.

Cruzó la línea de meta y los fuegos artificiales se disparan a mi alrededor. Mi corazón se acelera rápidamente. No puedo creer que esto está pasando.

—¿Carlos?—

Me sobresaltó al escuchar su voz en la radio, una sonrisa de niño pequeño se dibuja en el rostro. Agradezco que nadie me vea pero por el tono de mi voz todo mundo sabra que soy el puto hombre más feliz del mundo.

—¿Corazón?—

—Eres el campeón del mundo mi amor— grita al otro lado de la radio.

Sus palabras y la multitud gritando a mi alrededor me lo confirman. Soy el campeón del mundo mierda.

No puedo evitar gritar. Es un grito de celebración donde saco todo el estrés que he estado cargando en las últimas semanas.

El monoplaza de mi compañero, pero también de la persona contra la que peleé toda la temporada por este campeonato se pone a la par mío levantando el pulgar a mi lado. Yo asiento hasta que este me levanta el dedo corazón y comienzo a reír a carcajadas. Típico de Charles Leclerc.

Doy la última vuelta de la victoria mientras comienzo a agradecer a todo mi equipo por la radio.

—Gracias Charles por ser un compañero excelente y un rival excepcional todos estos años. No hubiera logrado esto sin ti empujándome por la espalda todo este tiempo...—

—Carlos me vas a hacer llorar— dije con tono burlesco en mi radio.

—Llora en el podio, quiero ver eso en persona por favor— digo en risas — Por último, al amor de mi vida —Puedo escuchar el "awww" clarito formándose alrededor de Gen — Gracias por ser mi compañera en todo este trayecto. No hubiera escogido mejor persona para celebrar este logro, gracias por creer en mí desde el día uno. Y los dos sabemos que es desde el día uno. Lo celebraremos juntos como se debe corazón. — Digo entre risas sabiendo que ella sabe a lo que me refiero

Hemos estado juntos un par de años ...

Bajo de mi monoplaza y la marea roja de mecánicos está ahí para gritarme mil cosas mientras canturrean mi nombre. Pero mierda, mis ojos solamente la buscan a ella sin remedio alguno. Mi corazón se acelera hasta que la encuentro sonriendo ampliamente. Es la mujer que quiero, para toda la vida es la única que quiero.

Llegó hasta ella, le debo todo a ella. Desde las celebraciones entre nosotros después de cada podio como fue costumbre hasta el dejarme quedarme dormido en su pecho después de cada derrota. En todo esto siempre ha estado ella y siempre será ella, no hay duda alguna.

—¡Lo lograste!— me dice mientras me sujeta de las mejillas con sus dos manos.

—No lo hubiera hecho sin ti— le digo con una sonrisa estúpida. Nadie me la quitara del rostro y cuando digo nadie es nadie.

Le susurro un "Te adoro corazón" antes de sellar sus labios con los míos nuevamente escuchando los gritos y aplausos de todas las personas a mi alrededor.

—Felicidades World Champion— me dice al momento de despegarse lentamente de mí.

—Desde que te conocí se siente como si todos los días haya ganado el campeonato...—

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—Es bonito— dice Gen mirando al trofeo.

Se nos ha hecho una tradición cada vez que ganó un gran premio el venir a cenar los dos juntos. Solos, un momento para nosotros dos. Y como es costumbre, aquí estamos. La veo con su vestido negro escotado de la espalda y puedo jurar que no ha elegido mejor atuendo para hoy.