Capítulo 31

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Valeria

A la mañana siguiente la habitación del hospital de mi padre era un hervidero de gente enfrentada. Yoon y yo llegamos allí a primera hora y le contamos a mi madre lo que había sucedido, por primera vez en mucho tiempo la vi dudar y aquello era tan importante como la segunda parte del plan.

Cuando llegaron los padres de Min Ho y el mismo desgraciado, le espetamos lo que hizo, sus padres no daban crédito y él estaba acorralado, pero no hay nada peor que alguien acorralado.

- Si no eres mía, no vas a ser de nadie – dijo dejándome helada. lo dijo delante de todos como si fuera lo mas normal del mundo. Aquellas palabras llevaban una connotación tan dura que Yoon se las tradujo a mi madre, que se quedó helada y lo comenzó a mirar con otros ojos. Los padres de Yoon le miraron cono si se hubiera vuelto loco y luego sucedió el milagro.

Una voz que temí no volver a escuchar jamás rompió el silencio que se había hecho en la habitación.

- Si se te ocurre poner una mano sobre mi hija, me encargaré de desmembrarte yo mismo – dijo mi padre – por favor, tradúceselo a ese hijo de la gran puta – insistió a Yoon, bajo la asombrada mirada de todos - llamad a un medico y sacadme de aquí que odio los hospitales.

Yo no pensé en nada mas solo me eche a sus brazos y lloré como una niña de dos años.

No me importaba nada mas que ver que mi padre estaba despierto y sin secuelas aparentes, estaba feliz y no me di cuenta de que todo el mundo se había marchado hasta que mi madre puso una mano en mi hombro y se arrodilló junto a mi al lado de la cama.

- Siento mucho hija no haber confiador en ti... siento de verdad todo lo que ha pasado - mi madre pidiéndome perdón era lo mas surrealista del mundo.

- Con respecto a eso, tu y yo tendremos que hablar - le dijo mi padre bien enfadado - nunca me he sentido tan decepcionado contigo como ahora - las palabras de mi padre fueron muy duras, pero mi madre se lo merecía.


Bajo la AuroraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora