Doble vida (Luzuplay)

Setenta y dos.

Para Raúl era increíble y algo injusto el como después de severo impacto mágico Luzu estaba casi intacto en su salud física. Si eso le hubiese pasado a él, ya estaría en el cielo conviviendo con su madre, Eos. Pero no dijo ningún comentario al respecto, no sería lo correcto.

- Realmente.... No entiendo que significa esto.. - musito Luzu mientras veía su aspecto en el pequeño espejo de mano - Dios mío...- habló nuevamente mientras se tocaba el cabello, dándose cuenta de que los pequeños puntos brillantes que simulaban ser 'estrellas'  eran perlas.

Luzu miró la pequeña perla brillante que tenía en su mano, era blanca y brillante,intento ponerla sobre la mesa de noche que estaba alado de la cama pero al hacerlo, la perla floto delicadamente y se coloco otra vez en su cabello.

- Parece que los dioses han provocado un cambio significativo en tu magia... - hablo Auron en voz baja mientras servía un poco de té en una taza y se la ofrecía o Borja - Eso es bueno... Pero provoca cambios permanentes en la apariencia. Y aunque te vez muy sano, es importante que te cuides.. - pidió tranquilamente mientras sonreía.

Luzu comenzó a sentir una sensación de tranquilidad pasar por todo su cuerpo, la voz de su acompañante era tan relajante y suave que empezó a sentir los ojos pesados. Esto le trajo un recuerdo del pasado, lo que le hizo reír.

-.... Siempre que enfermo o me pasa algo grave has cuidado de mi... - dijo mientras le daba un sorbo al té con lentitud -... ¿Recuerdas esa vez que fui a las áreas nevadas de Karmalad con Fargan y el me arrojó a las aguas heladas durante una pelea de bolas de nieve?... - preguntó mientras parpadeaba un par de veces.

Auron abrió los ojos y miró a Luzu con asombro durante unos segundos, para después sonreír.

- Ese día no me dijiste que ibas a salir, así que tuve que correr de punta a punta por todo el territorio con un montón de cobijas para mantenerte caliente... - dijo el albino mientras se cruzaba de brazos - Casi te da hipotermia y tuviste fiebre la mitad del mes.. - exclamó mientras suspiraba.

Ambos se quedaron en silencio un momento y después se rieron simpaticamente,hay tantas historias entre ellos que casi nadie conoce y jamás se sabrán...

Auron estuvo apuntó de decir algo más cuando alguien toco a la puerta. Casi de inmediato su sonrisa se borro y ordenó que pasaran.

Luzu sólo puso un gesto de disgusto mientras torcia los labios y dicho gesto se marcó discretamente más cuando vio a quien entró por la puerta.

Era Quackity quien entró a paso tranquilo para después hacer una reverencia, poniendo ambas manos en su abdomen bajo.

- Sus santidades... -  saludo el menor con una pequeña sonrisa - Solo viene en nombre de Rivers para notificarles que, afortunadamente, el hechicero a recuperado la capacidad de hablar... - dijo mientras cerraba los ojos y ponía un gesto gentil  - Sería bueno si su santidad del sol va a verlo... Yo puedo quedarme a cuidar a Luzu. -

Auron sonrió con amabilidad, se levantó de la silla dejando delicadamente su taza en la mesa de noche, le revolvió un poco el cabello y asintió con la cabeza.

- De acuerdo Alex... - aceptó gentilmente mientras sonreía - Cuida bien de su santidad, yo volveré después a darle medicamento - dijo mientras salía de la habitación, no sin antes dedicarle una última sonrisa a ambos.

Quackity y Luzu se quedaron solos.
En silencio, mientras se miraban mutuamente a los ojos, más sin embargo el menor no dijo nada, solo mostró una pequeña sonrisa y se sentó alado de Luzu.