XXI

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—Hoy tenemos una cena, tu padre quiere que esté toda la familia.

—¿Los bastardos también?

—¡Aemond!

—¿No conforme con quitarme el ojo, Lucerys también quiere quitarme a mi esposa?

—Sí no han consumado aún no es válido hijo.

—El rey Jaehaerys y su esposa la reina Alysanne no consumaron hasta después de su segunda boda.

—Eran reyes.

—Y aún así intentaron de todo para separarlos.

—Aemond, sé que Aeysant necesita espacio para adaptarse, pero tiene que prevalecer la sangre valyria.

—Lo sé.

—Entonces mete tu...

—¡Aegon sal de aquí! —gritó Alicent tomando con su mano un poco de agua de la bañera de Aemond, arrojándosela a a Aegon en la cara.

—¿Qué? Sólo quiero darte un consejo, hermano menor.

—Aegon.

—No dejes que ni una gota se escapé.

—Aegon, por los Dioses.

—Embarazala pronto, o alguien más lo hará.

—¿Qué dices? Aegon guarda silencio.

—¿Qué? Digo la verdad, Lucerys también quiere poner sus hijos en el vientre de Aeysant, hay que ser un idiota para creer que su amabilidad es sólo eso, ya te quitó el ojo una vez. ¿Dejarás qué te quité a tu esposa también?

—Aegon, es suficiente.

—Yo sólo digo lo que pienso.

—Milagrosamente piensas.

—Basta. —intervino Alicent. —Helaena querida. ¿Qué sucede?

—Un bebé en la tormenta, un león en la puerta, verde.

—¿Qué has dicho?

—¿Dijo un bebé en la tormenta?

—¡Aeysant es una tormenta!

—¿En serio Aegon? Cuando fui a Storm's End no lo había notado.

—Déjame ser inteligente. —pidió Aegon. —además, nadie te preguntó.

—Maldito...

—Basta ya, parecen niños. —regañó Alicent. —Aemond. ¿En dónde está Aeysant?

—Con Lucerys haciendo lo que Aemond no es capaz.

Aemond, con su cabeza caliente, tomó a su hermano del cuello y hundió su cara en el agua, mientras esté golpeaba la bañera intentando salir.

—Veo que Aeysant no se va a desilusionar. ¡Casi me matas!

—¿Me lo viste?

—Dioses, ustedes crecieron y se bañaron juntos varias veces. —recordó la mayor. —¿En dónde realmente está Aeysant?

—La vi hablando con Joffrey.

—¿Velaryon?

—¿Qué otro Joffrey?

—¿En dónde estaban?

—Los vi hablando en el jardín.

Alicent se acercó a la enorme ventana, mirando a Aeysant y a Joffrey Velaryon charlando junto a Lucerys Velaryon.

—Está con Joffrey y Lucerys. —avisó, escuchando el cuerpo de Aemond salir del agua.

—¡Asqueroso, tápate! ¿Pero cómo tienes tan buen cuerpo?

𝐀𝖾𝗒𝗌α𐓣𝗍 ─ 𝐀𝖾ꭑⱺ𐓣ᑯ 𝐓α𝗋𝗀α𝗋𝗒𝖾𐓣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora