𝐀𝖾𝗒𝗌α𐓣𝗍 ─ 𝐀𝖾ꭑⱺ𐓣ᑯ 𝐓α𝗋𝗀α𝗋𝗒𝖾𐓣

XXV

—¿Nunca te has imaginado saliendo del vientre en esté momento?

—¿Uh?

—Tienes quince. ¿Te imaginas salir del vientre a está edad?

—Aegon.

—Que inteligente soy.

—Nosotros no salimos, nos expulsan.

—Ahh, shh, déjame ser inteligente.

—Por los Dioses. —rió Aeysant. —Aegon. ¿Sucede algo?

—Siento que soy el peor Targaryen.

—¿Después de Maegor?

—Maegor al menos fue rey.

—Inició su reinado con sangre y lo terminó con sangre, lo que empieza mal termina mal.

—Pero al menos enorgulleció a Visenya.

—Todo padre quiere ver a su hijo convertirse en alguien grande, no lo niego, pero, Maegor fue asesinado por el trono, su ambición lo llevó a eso. ¿Crees qué sí Visenya hubiese sabido qué Maegor iba a morir así lo hubiese puesto en el trono?

—Esa perra estaba demente.

—Hey, por ella eres príncipe ahora.

—Quisiera ser el hermano sin responsabilidades. ¿Sabes? Sí por mí fuese, dejaría que Aemond fuese el mayor, es el hermano que estudia filosofía e historia y entrena con la espada. Yo sólo quiero beber y follar.

—Dioses, no necesitaba tanta explicación.

—Eres la única con la que siento que puedo hablar.

—Me alegra oír eso.

—Siempre creí creí Aemond se casaría con la mujer más tonta de Westeros para manipularla y hacerse ver como el inteligente, pero se ha casado contigo, no se te escapa ni una, analizas todo.

—¿Supongo qué gracias?

—Aegon. —dijo Otto entrando a las Cocinas. —¿Qué haces aquí?

—Mi cabeza dolía, Aeysant me ha preparado un té.

—Un momento. ¿Estás sobrio?

—Sí. ¿Por qué?

—¿Qué sucede aquí? ¿Aegon?

—¿Qué?

—¿Estás sobrio? —Alicent tocó su cabeza. —¿Qué haces sobrio?

—¿Es malo estar sobrio? —Aegon frunció el ceño. —¿Qué pasa con ustedes?

—Es... una novedad solamente.

—¿Novedad? Déjenme. —gruñó saliendo de las Cocinas.

—Es la primera vez desde que camina que lo veo caminar recto.

—Princesa Aeysant. ¿No debería estar con su esposo?

—Sir Otto. ¿No es esa la corona del rey Viserys?

—El rey me ha pedido limpiarla.

—Es una novedad, creí que era imposible limpiar la corona encima de una cabeza.

—Princesa Aeysant. ¿No has visto a Aemond? —el mayor rápidamente cambió el tema.

—No. ¿Suced...

—No, descuida, sólo quería saber en donde está, probablemente esté con Vaghar, esa bestia consume todo de él.

—Tienen una conexión supongo.