Cap. 47: Pelea

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Andy.

-Andy ¿Por qué no me dices la razón de que te vas?- insistió James por milésima vez.

-Eres tan insistente- me queje- porque me quiero ir de esta mierda de internado.

Estábamos en mi habitación conversando sobre el viaje a Alemania. Me iría dentro de dos semanas y me olvidaría de todo, pero pensaba hablar con Maureen antes de irme.

Se sentó en mi escritorio y jugó con un lápiz. Yo ordenaba mis libros en la mochila para mi clase de matemáticas. Me estaba yendo pésimo en la materia y necesitaba aprender a toda costa.

-Soy tu amigo y sé que algo está pasando- me sujeto del brazo

-Tengo ganas de irme y olvidar todo, eso- quería contarle, pero no quería morir a manos de un psicópata.

-¿No me dirás?- se volvió a sentar- bien- se quedó mirando la ventana

Seguí ordenando y luego fui a organizar mi ropa en el closet. Murray tarareaba una canción molesta, me daban ganas de echarlo.

-Murray deja de cantar por favor ¡lo haces pésimo!- se calló un rato, pero algo en el ambiente me incomodó- oye puedes hablarme, lo siento si he sido mala. He estado muy estresada con esto del viaje y...-me interrumpió apareciendo detrás de la puerta del armario que bloqueaba mi vista hacia el escritorio

-Andy, ¿me puedes decir que significa esto?- me mostro la carta y la foto de mi acechador

Me quede petrificada en mi lugar, sin saber que responderle. Ahora me obligaría a decirle a la policía o a mis amigos.

-¿Es por esto que te quieres ir, verdad?- leyó la carta yo agache mi cabeza sin saber que hacer- y esta foto... ¡es Harrison! Nunca me dijiste que tenías algo con él.

-No tengo nada con él James- dije y le quite la carta de las manos- y sí esta es la razón por la que me voy ¿contento?

Estaba pasmado, se veía que tenía muchas emociones juntar y debatía cual demostrar primero.

-Así que estabas investigando las muertes... ¿en qué pensabas? ¡Es extremadamente peligroso!- salió su enojo- Mierda Andy, no quiero que te vayas del internado- me abrazó con fuerza.

-Te voy a echar de menos James- le respondí el abrazo- tengo miedo-admití

-Te prometo- se alejó un poco para mirarme a la cara- que encontraremos a este hijo de puta y si puedo lo matare a golpes por hacer esto- sonrió reconfortante

Me reí y volví a poner mi cara en su pecho, él se encargaba de acariciar mi cabello.

-¡Strauss tenemos que hablar!- Luke entro en escena... genial, se armaría una pelea- Creo que volveré cuando estés desocupada- se fue dejando la puerta abierta

-Ok, eso fue demasiado incomodo- dije para cortar la tensión

-Ni me lo menciones- saco su agarre- vamos a clase, llegaremos tarde.

Asentí y nos fuimos a la clase del profesor Mcclaire. Odiaba los números pero este profesor estaba bueno... o sea, los hacía buenos. Ahora mi materia estaba por los suelos pensando en tantas cosas, creo que tendría que entrar a reforzamientos aunque los odiara.

-Buenos días clase- saludo Robert

Contestamos y nos acomodamos para el inicio de la clase. Al término me acerque para pedirle los reforzamientos.

-Profesor Mcclaire-estaba acomodando cosas en su maletín

-¿Sí? Oh Andy eres tú- sonrió abiertamente- Dime que necesitas

-Quería saber si me podría reforzar la materia, no entiendo casi nada de matemáticas- hice una mueca- definitivamente lo mío son las letras.

-Por supuesto, en la sala de profesores te ayudaré. Habrán unos tres chicos más, pero no creo que molesten- sonrió- son del equipo de futbol, tienen que mejorar sus notas si quieren seguir jugando. Sería el jueves después de clases.

-No me molesta para nada- sonreí- Muchas gracias profesor Mcclaire.

-Te he dicho que me llames Robert, profesor Mcclaire es muy formal.

-Ok, Robert- rodé los ojos sin que se diera cuenta- lo veré el jueves después de clases.

Salí y me encontré con Luke. Sus intensos ojos me miraban fijamente haciendo mis piernas tiritar.

-Andy ¿todo bien?- Pregunto Murray mientras me abrazaba por los hombros

Despegue mi mirada del chico ojiazul y camine con James.

-Sí, todo bien- le sonreí

Luke se colocó en frente de nosotros tapándonos el paso.

-Lo siento Murray pero Strauss y yo tenemos que hablar-agarro mi brazo y me tiró a su lado.

-Te puedes ir a la mierda Luke- me tiro de vuelta.

-¿Sabes? Eres patético Murray- comenzaron a acercarse lentamente y yo no podía reaccionar- Intentas quitarme todo lo que tengo pero no puedes, al final todos me prefieren a mí- en su cara se formó una sonrisa maliciosa- ella me prefiere a mí. Y eso te hunde.

-¿Cómo lo sabes?- la voz de James estaba cagada de ira- No tienes idea de lo que ella quiere. Y al final tú te hundirás por su decisión- lo último fue solo un siseo.

Luke se abalanzo contra él y comenzaron a golpearse en el suelo, la gente formó el típico círculo alentando la pelea. Un pánico recorrió mi cuerpo y entre para separarlos. Vi que Nevenka y Maureen también intentaron separarlos pero no podíamos porque la fuerza de ambos era demasiado para nosotras.

-¡Bruce ayúdame con Murray!- le grite al chico que acababa de aparecer entre el circulo.

Bruce tiró de Murray hacia atrás y yo empuje con todas mis fuerzas a Luke, este insistía en atacar a mi amigo por lo que le pegue una cachetada que lo saco de lugar. Me miro sorprendido, mientras la sangre de su ceja y mejilla corría por su rostro.

-¡Basta por favor!- Grité- ¡El resto se puede ir a la mierda!- Los mirones se fueron rápidamente asustados.

Maureen, Nevenka y Bruce se quedaron. James estaba con la respiración agitada y mirando con odio a Luke, pero ya no lo estaban sujetando.

-Vamos a curarte- empuje a Luke ignorando a mis amigas, aunque se veían dispuestas a seguirme.

-¡Andy!- gritó James a lo lejos.

Me voltee para mirarlo a los ojos. Su labio estaba roto y se veía que tendría un ojo morado.

-Nos vemos en el almuerzo, lo prometo- sonreí sin mostrar los dientes y se fue con Bruce en sentido contrario a nosotras.

Fuimos a enfermería donde solicite un kit de emergencia a la enfermera y nos reunimos alrededor de una camilla. Luke se sentó quedando a mi altura y las demás estaban paradas a su lado sin decir nada. Saque algodón y lo moje con alcohol y comencé a limpiar el corte de la ceja. El chico se quejó pero no se movió.

-Ahora es cuando me dicen que quieren- dije en tono neutral mientras sacaba otro pedazo de algodón.

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Perdón por la espera eterna pero en mi ciudad hubo aluviones y viajé sin el computador, prometo subir rápido los caps :) voten y comenten; que lean esto me alegra el día <3

Locuras AdolescentesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora