Locuras Adolescentes

Epílogo: Nuestros Futuros

Maureen

-Mamá ¿puedes dejar de hacer eso?- mi madre a cada minuto me limpiaba supuestas manchas de mis mejillas- me dejaras las mejillas moradas

-Lo siento- su rostro se entristeció

La abracé y le dije que se calmara. Ni yo estaba tan nerviosa. De pronto tocaron mi hombro, voltee y me abalance contra esa persona.

-¡Andrea Ysabel Strauss! ¿Qué mierda haces aquí?- chille emocionada

-La boca Maureen Foster- reprendió mi madre

-Perdón- dije despreocupada y volví a centrarme en mi amiga- ¿Cuándo llegaste?

-El avión aterrizo anoche, vine para darles la sorpresa- sonrió- además no podía perderme mi propia graduación ¿no?

Reí y fuimos a caminar por los alrededores del campus de SAF.

-¡Hey ustedes!- gritaron

Sincronizadamente nos volteamos y vimos a dos chicas correr a nosotras, ambas tenían las túnicas rojas propias de la graduación. Era Vicky junto a  Cassie.

-¡Dios mío! Aquí están las mejores investigadoras del mundo- sonrió Cassie

-Que ustedes fueren de mucha ayuda también, enserio- sonrió Andy agradecida.

-Es muy raro hablar con ustedes ahora y saber qué hace tan solo dos meses nos estábamos comiendo las uñas por el profesor Mcclaire- dijo la pelirroja

-No recordemos eso ahora, vamos que tenemos mucho que pensar sobre las universidades- sonreí

-Hablando de eso, tengo que hablar con mamá por la solicitud en Cambridge- dijo Cassie

-¿Cambridge?- dije impresionada

-Sí, me han aceptado en el departamento de filosofía- sonrió orgullosa- bien, nos vemos luego. ¿Van a la fiesta post-graduación?

-No lo...-Andy me corto

-Lo intentaremos ¿sí? Necesito ir a una fiesta, puedo perder practica- bromeo

Las chicas se fueron corriendo, mientras que nosotras caminando calmadamente nos devolvimos al comedor principal. Donde estaban las dos chicas que nos faltaban.

-¡Oigan perras aquí!- grito la chica a mi lado agitando exageradamente los brazos

Algunos padres presentes se le quedaron mirando pero parece que no le importo en lo absoluto.

-¡Andy!- la abrazaron ambas a la vez

Luego me asfixiaron a mí.

-¿Qué no estabas en Alemania?- pregunto Nevenka

-No podía perderme por nada del mundo mi graduación, chicas- rodo los ojos- juntas en esto hasta el final, además no atrape un asesino para luego no volver nunca más

Ahora reíamos de la situación.

-Mau, tu chico espera- me señalo Mariah

Lo busque con la mirada y al verlo, ni di aviso a mis amigas que me iba. Solo corrí a sus brazos.

Sin saludarlo ni nada, lo bese con desesperación. Tenía la necesidad de sentir sus labios con los míos y disfrutar, relajarme, sentirme protegida por él.

-Que linda bienvenida- sonrió León, su perfecta sonrisa

-Cállate y bésame- lo tire del cuello para volver unir nuestros labios una vez más.

Sentí unos carraspeos a mis espaldas y me separe de los labios de mi novio.

-Maureen, te estábamos buscando- mi madre parecía divertida y mi padre tenía un ceño fruncido