Fire meet gasoline - Charles Leclerc Fic ✔️

Capítulo 31

"Necesitas un equipo, no puedes hacerlo solo". Daniel Ricciardo, piloto de Fórmula 1.

La chica se gira y queda frente a frente con el monegasco, quien le sonríe con una combinación de ternura y malicia.

—Me voy —anuncia ella siempre sonriéndole.

Pasa por su lado y va en busca de sus cosas, sin embargo, Charles la toma de la mano.

—Quédate para una película.

—Mañana tienes carrera, debes descansar.

Charles se acerca aún más a ella.

—Entonces quédate a dormir conmigo.

Astrid frunce el ceño ante ese pedido, pero no borra la sonrisa.

—¿Por qué querrías que me quede contigo? —pregunta con divertida curiosidad.

—Porque no mentí cuando dije que te quiero a ti y quiero pasar tiempo contigo y si tengo solo la noche para ello, entonces que así sea.

Charles se termina de acercar, alzando una mano para tomar su mejilla y acariciarla con ternura. Sus palabras no la sorprenden, es algo que ha notado en él desde el día en el hospital en Bélgica.

—No tengo pijama.

—No pienses en excusas baratas porque pienso destruirlas todas con tal que te quedes aquí.

Ella sonríe y asiente lentamente.

—Solo porque no quiero estar sola en caso de que Ariel piense en ir a buscarme.

Charles asiente por igual y la guía hasta la habitación principal y una vez más se vuelve a asombrar con el tamaño de la cama. Él saca una camiseta y un bóxer de su ropa y se la pasa a Astrid, esta lo toma y se queda viendo a Charles con la segunda prenda al aire.

—¿Es en serio?

—Puedes dormir sin él si tú quieres. No me molesta.

Le guiña un ojo, alejándose mientras pasa su camisa sobre su cabeza. Ella le lanza una mirada asesina y se va en busca del baño para cambiarse. Una vez tiene puesta la ropa de Charles y ha pasado su dedo con pasta dental por sus dientes, se une al piloto en la cama. Astrid muerde ligeramente su labio inferior viendo que él ha acomodado una almohada al centro.

—Sé que te gusta dormir abrazando una almohada —admite Charles, ella notando un poco de color en sus mejillas mientras lo dice.

Se mete bajo las sábanas y toma la almohada entre sus brazos mientras hunde la mitad de su rostro en ella viendo directamente a Charles, quien también se acomoda en su costado para verla. Sus ojos se conectan y ni uno puede evitar sonreír a lo torpe.

—Entonces... ¿Me mostraras dónde tienes ese tatuaje de taco? —pregunta de la nada él con un tono burlón.

Astrid cierra sus ojos y gruñe al tiempo en que hunde completamente la cabeza en la almohada.

—Maldito Lando o Pierre que te dijeron. —Charles ríe ante su reacción mientras lleva una mano a su rostro para quitarle un mechón de cabello—. No tienes que volver a preguntar cuando ya te han dicho todo. ¿Sabes qué? Me voy a dormir. Buenas noches, Leclerc.

La salvadoreña toma la almohada y con un mohín en su cara se gira hacia el otro lado mientras Charles ríe, disfrutando de sus reacciones. Astrid no tarda en quedarse dormida con la seguridad de la presencia del monegasco mientras este la observa con una sonrisa sin creer lo calmada y linda que se ve durmiendo; la verdad es que extrañaba verla así, sentir el calor de su cuerpo a unos centímetros del suyo. Él suspira y poco a poco se queda dormido con una sonrisa tonta en su rostro, pensando en que dormir a su lado parece un buen incentivo para la carrera.