Capítulo 54

2.5K 165 15
                                    

"Como la F1 es un entorno dominado por hombres, tienes que probarte a ti misma. Y en primer lugar, eso significa tener la oportunidad de probarte a ti misma". Susie Wolff, expiloto de automovilismo y directora de F1 Academy.


La temporada del 2022 de la Fórmula 1 ha terminado, los pilotos se despidieron de Sebastian en su última carrera y aún desde casa, como toda una fan que vio al piloto progresar en la máxima categoría del automovilismo, Astrid lloró viendo el video final para Vettel y le fue inevitable no pensar en su padre mientras veía esas últimas donas del piloto en Abu Dabi. Ahora amanece y aún no puede creer que fuese el final de su carrera.

—Al menos lo viste correr en su último año —intenta animar Florence a su mejor amiga, pasándole una taza de café.

Astrid sonríe.

—Lo sé. Conocerlo fue todo un sueño.

—¿Sabes? Me alegra que después de todo, recuerdes todo como una buena experiencia.

La castaña toma un poco de su bebida caliente y ladea un poco la cabeza.

—Es que lo fue. Aún con el corazón roto, prefiero quedarme con todo lo bueno.

—Pero entonces ¿lo has perdonado o no?

Astrid deja caer su frente sobre sus antebrazos apoyados en la mesa.

—No lo sé —reniega en un tono infantil. Sube la cabeza de golpe mirando directo a los ojos azules de su amiga—. Le di a entender que solo porque me hablara bonito no significaba que lo había perdonado y luego empezó a decir cosas y... me besó.

Florence esconde una sonrisa maliciosa detrás de su propia taza con café.

—Sí, ya me contaste ese lado de la historia —comenta con diversión—. Y lo entiendo, pero ¿qué harás si se aparece en la puerta... otra vez?

La rubia alza una ceja después de lanzada su pregunta y Astrid hace un mohín de frustración

—Tampoco lo sé —dice con desgano—. No me pude resistir en México, no sé cómo sería si lo vuelvo a ver.

Florence pone su mano sobre la de su amiga por encima de la mesa y le sonríe.

—Dijo que podrían hacerlo trabajar, quizás sea verdad y logren hacerlo.

Astrid ladea la cabeza.

—Flo, te amo, pero sabes que el próximo año empiezo la especialización, además del trabajo con Mercedes. Tú mejor que nadie sabes que una de las razones por las que no tuve pareja antes de Charles era por mi falta de tiempo. —Ella se encoge de hombros—. No creo que sea justo para ninguno de los dos estar en una relación así de floja y tampoco le pediré que me espere. Por otro lado, ya vimos que la pasó muy bien con Charlotte anoche y que no me ha escrito ni para felicitarme.

Ambas chicas ruedan los ojos, recordando las fotografías que Lando publicó en su cuenta temprano por la mañana. La británica toma la otra mano de la castaña y le sonríe de oreja a oreja.

—No importa, está bien. Quizás sea para mejor. Tú sabes lo que más te conviene. Confía en tus instintos.

Astrid alza una ceja y hace un movimiento rápido de cabeza mientras suelta una mano y la lleva a su estómago.

—Pues mis instintos me dicen que tienen antojo de algo dulce con ácido.

Flo ensancha su sonrisa y se pone de pie. Se acerca al refrigerador y de él saca una caja rosa con flores y la pone sobre la mesa. Astrid la observa con curiosidad, frunciendo el ceño mientras la ve abrir dicha caja. Del interior sale un hermoso pastel de un nivel de diferentes colores.

Fire meet gasoline - Charles Leclerc Fic ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora