𝖠𝗆𝗈𝗋 n̶o̶ 𝖼𝗈𝗋𝗋𝖾𝗌𝗉𝗈𝗇𝖽𝗂𝖽𝗈 || 𝗖𝗼𝗯𝗿𝗮 𝗞𝗮𝗶

~26~

𝗝𝗲𝘀𝘀𝗶𝗰𝗮

Nada más llegar al instituto tuve que pasar un control para verificar que no llevaba nada peligroso. Después me dejaron pasar.

Tan solo tuve que caminar un poco para percatarme de que bastantes alumnos murmuraban a mi alrededor pero no me importó y continué caminando.
Noté como me abrazaban por la espalda.

—Hola, amor—dijo Eli.

—Hola—dije girándome para después dejar un pequeño beso en sus labios.

—¿Qué clase tienes?—me preguntó.

—Español—respondí.

Puso una mueca.

—Yo tengo Química—respondió.

El timbre sonó.

—Supongo que nos vemos luego—dije.

Él asintió antes de dejar un beso en mis labios en forma de despedida.

—Te amo—dijo.

—Yo también.

Él se fue hacia las escaleras para ir a su clase.

Caminé por los pasillos hasta llegar a mí aula.
Algunos alumnos ya estaban allí, los cuales cuando pasaba por su lado ponían su mochila o su piernas en la silla que tenían a su lado.

Simplemente caminé hasta el fondo donde había una mesa libre para sentarme ahí.

Supongo que las clases que no comparta con mis amigos serán siempre así.

[...]

Caminé hasta mi taquilla donde guardé algunas cosas.

—Jess—escuché la voz de Eli—. ¿Qué tal la clase?

—Normal—respondí.

Él asintió.

—¿Vienes a que te enseñe eso?—cuestionó.

Yo asentí.

Tomó mi mano para que caminara con él por los pasillos del instituto.
Entramos en lo que me di cuenta que era el cuartito del conserje.

—¿Qué hacemos aquí?—cuestioné confusa.

Él puso su mochila sobre el escritorio y sacó algo.

—Podríamos saltarnos una clase—dijo mostrándome un condón.

Lo miré algo sorprendida.

—¿No entrará nadie?—cuestioné.

—Nadie suele entrar aquí—se acercó y besó mi cuello—. Pero la posibilidad lo hace más divertido. Entonces, ¿qué me dices?

Lo besé.

—Vale.

Él sonrió antes de sentarme en el escritorio.
Tiró su mochila al suelo para dejarme más espacio.

[...]

—No puedo creer que acabemos de hacerlo aquí—mencioné cuando salimos del cuartito.

—Ha estado muy bien—dijo.

—Yo no he dicho que no—dije para luego guiñarle un ojo.