Diarios de Supernatural [Sam Winchester & ____]

CAPÍTULO 29

CAPÍTULO 29

Paso un mes. Me acuerdo cuando perfectamente como las puertas del infierno se habían abierto y la jaula donde estaba Lucifer. Y todo por mi culpa. Al menos aun seguía con los hermanos Winchester, pero ya no era lo mismo. Sam y Dean estaban más separados y yo tenía la responsabilidad de eso. Todo era muy complicado.

De Castiel, no sabía nada de él. Seguro que estaba en el cielo ayudando a Dios o cosas de ángeles.

Volvíamos a Kansas. Después de estar un mes viajando. Nos cogimos unos días libres. Aunque no nos podíamos permitir tantos días de descanso. Al menos ya no tenía un gran peso, que se llamaba Ruby.

Las espadas de los arcángeles había desaparecido. Mi padre investigo mucho sobre esas espadas y los arcángeles. Podía ser una pista para que Lucifer volviera a su jaula.

Ese día volví a casa. Quería estar con mi padre. Con las cosas tan duras que había pasado entre Ruby, el inicio de una apocalipsis y que Dean y Sam no se hablaban, todo era diferente. Con mi mochila puesta, llame al timbre el que un pasado fue mi hogar, acto seguido abrieron la puerta y era mi padre.

-¿Que haces aquí, cariño? - dijo mi padre invitarme a pasar

-Solo quería verte – dije mientras descargaba la mochila – Y estar con mi padre

-Esta bien, sabes que siempre sera tu casa

-¿Que haría sin ti? - dije en susurro

-No lo se – suspiro – Se que es duro salir de caza

No dije nada, no quería decirle que yo inicie una apocalipsis y que libere a Lucifer de su jaula y que el mundo estaba en peligro. Deje de pensar en eso, y me di una ducha. Por fin agua corriente por mi cuerpo.

Al salir baje, estaba hambrienta, me hice un simple sándwich de queso. Pero mi padre me entrego una carta, me la dejo encima de la mesa. Lo mire

-¿Que es? - pregunte con curiosidad

-Del instituto

Solo con la palabra instituto, ya no me gustaba. Pero cogí valor para abrirla. Solo al abrirla me daban ganas de vomitar. La leí por encima y solo leí el nombre de Jennifer Williams me puse mala. La carta decía que me invitaba a una reunión de antiguos alumnos y encima dice que traiga algún acompañante. Mierda. La arrugue haciendo una bola y la deje a un lado. Ya tenía suficiente con mis problemas. Mi padre me miro.

-¿No vas a ir? - dijo con curiosidad

-No – escupí seria – No quiero ver la cara esa rubia

-Se que te hizo la vida imposible, pero la gente cambia

-Lo se, pero obviamente que ella no cambia – suspiré - ¿Y a quien llevo?

-Se lo puedes pedir a Sam

Lo mire. ¿Un baile con Sam Winchester? Podía ir a presumir. Pero no se que lo que haría

-Lo pensaré papa

Mi padre me dejo sola y acabe de comer el sándwich de queso. Lo recogí todo y me eche en la cama, cogí mi móvil. Quería llamar a Sam y decirle lo del baile, pero mejor en otra ocasión. Al final me quede dormida