Yoori.
Caminaba apresuradamente por el pasillo, iba 20 minutos tarde puesto que me había quedado dormida, me repetía mentalmente ser más responsable y dejar la pereza a la hora de despertarme. De seguro y mi adorada madre piensa que hoy no la vengo a visitar.
Ya iba llegando cuando un chico alto me pasa por el lado ¡Será idiota! ¡Casi choca conmigo!
Me adentré a la habitación y mi madre estaba acostada mientras leía un libro, al verme sus ojos brillaron de emoción, no pude evitar sonreír nostálgica al verla en ese estado. Mi pecho se infló de emoción y tristeza, ambos sentimientos mezclados.
Sin pensarlo dos veces me lancé a sus brazos, no hay mejor consuelo que los brazos de tu madre. La abracé con tanto amor que sin darme cuenta las lágrimas se deslizaban por mis mejillas.
-Siento haber llegado tarde-dije en medio del abrazo y acaricié su espalda. Al separarnos me limpié las mejillas y sonreí avergonzada.
-Tranquila mi pequeña- acarició mi cabeza con la mano. Sentir su toque me transmitía confianza.
-¿Cómo has estado?-me atreví a preguntar mientras mordía levemente mi labio inferior.
-Mucho mejor, ya se me han aliviado los dolores de cabeza- me sonrió cortamente y agradecí a Dios por ello.
-Ya deposité la cuota mensual-le avisé. Bajé mi cabeza y me dije mentalmente que no debí haber hablado eso.
-¿Sigues trabajando en eso?-asentí no muy felíz-. Dios niña cuántas veces te he dicho que eso no es decente. -Habló a modo de regaño.
- Lo sé- contesté bajito y con un nudo en la garganta.
Ella sabía a lo que me dedicaba por las noches, simplemente no pude ocultárselo, después de todo las madres saben cuando sus hijos mienten.
Recuerdo que al principio cuando le conté que me habían aceptado en un club nocturno se puso fatal, esa noche no dormí porque me sentía culpable de su recaída, luego de ello trato de no tocar ese tema cuando vengo a verla, aunque hoy se me fue la lengua.
Y de una forma u otra verla en ese estado no me ayudaba mucho que digamos. Ver sus cansados ojos, las enormes ojeras que portaba y lo pálida que está su piel, no es agradable.
Da ganas de llorar ver cómo habla pausada y débilmente.
Traté de ignorar esta ola de sentimientos angustiosos y tratar de aligerar el ambiente, que por un momento se puso tenso.
-Ahora que me ubicarán en este hospital, espero poder dejar aquel trabajo- expresé tratando de convencerla aunque se qué será difícil, ya que entre los gastos de la casa y los de él hospital no me alcanzarán. Ese trabajo por muy indecente que sea, pagan bien.
-Que estraño- la miré alsando la vista con cara de interrogación.
-¿Qué pasa?-fruncí el ceño. Rápido toqué su frente, pero no habían indicios de fiebre.
Me estaba preocupando por algo de lo cual no tenía respuesta. Presté toda mi atención en ella luego de haber retirado la mano de su frente.
-Nada, relájate- habló rodando los ojos. Le agradecí a mi corazón que es capaz de soportar cualquier cosa. Menos un infarto; supongo-. Es solo que el doctor Jeon no me ha visitado hoy- habló triste. Otra vez el bendito doctor.
Siempre que vengo a verla es hablando de lo bien que el la trata, de lo atento que es con ella. Ésto y lo otro, ¿Y si ella gustaba de él?
Bueno como bien dicen es mejor hablar que quedarse con la duda.
-Mamá, ¿Él te gusta?- me atreví a preguntar nerviosa jugando con mis manos. La miré de reojo.
-¡Te estás escuchando!- expresó y agaché la cabeza avergonzada-¡Hija él tiene casi tu edad!- dijo enfatizando cada frase.
Abrí los ojos sorprendida y una ligera o se formó en mi boca. No debí haber preguntado aquello.
Pobre doctor y yo creyendo que es un viejo verde.Joder, tantas veces lo he maldecido y hablado mal de él, que ahora me siento mal.
Soy una tonta.
...
Había salido ya de el hospital, siento mucho que varios enfermeros hayan escuchado mis maldiciones.
La tarde la tenía desocupada por lo que la dedicaría a estudiar y prepararme para la entrevista de él lunes.
Realmente espero que me acepten.
...
Jungkook.
-Doctor Jeon. -Otra vez la bendita secretaria, no se cuántos doctor Jeon he escuchado hoy.
-Pase- puse mi mejor cara para recibirla. Aunque por dentro la estaba insultando, Min ChaeSoo es irritante.
-Lamento interrumpirlo pero ya tengo el currículum de su futura asistente, solo bueno, si usted la acepta. - Dijo lo último avergonzada, lo supe por el color que tomaron sus mejillas.
-Si, déjalo aquí- señalé el escritorio.
Captó mi orden y luego de dedicarme una reverencia se retiró.
Ahora tendría que trabajar con una asistente/aprendíz/pupila. Bueno da igual.
Comensé a leer la planilla.
Choi Yoori, 23 años de edad, graduada en enfermería general.
Notas medias.
El apellido me parecía intrigante aunque por la foto de la planilla se veía bastante bonita. Pero lo peor vino después, cuando ví que no tenía una gota de experiencia, ni siquiera había hecho sus prácticas de pasantía y recién comenzaba el servicio social. Se acabó el descanso.
Supongo que ser un gran doctor representa tener que enseñar a otros.
Solté la planilla con un suspiro cansado, mañana por ser domingo no tengo que trabajar y por el reciente mensaje que Taehyung, mi hyung y superior, que me ha mandado, no me libraré tan fácil de una noche de tragos.
Supongo que debo ir preparando apenas llegue al departamento un buen frasco de pastillas para la resaca.
Y pero aún, el quiere que lo acompañe a un club nocturno, supongo que a ver mujeres casi desnudas. No me quedó más opción que aceptar.
Mañana sería otro día.
[•••]
Otro capítulo más, ando bien inspirada.
Espero su apoyo.
Les saluda el doctor Jeon. Mua💋 🥰.
No tengo fecha de actualización y el bendito Wattpad hizo de las suyas desordenando los capítulos que tengo en borradores.
Espero que voten y comenten.
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UNHOLY |Jungkook| |+18| (Completa)
FanfictionMami no sabe que papi se está poniendo caliente en un prostíbulo haciendo algo... ''Impuro''. Donde Choi Yoori es una enfermera con doble vida y problemas encima y Jeon Jungkook es un apuesto y reconocido doctor que qued...