XXI

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¡Te mataré!

Rugió enfurecido Junghyun al abrir la puerta de su palacio, no dudando en seguirle los pasos al alfa pelinegro quien al verlo liberó la cintura de su omega para salir disparado en dirección contraria, su vida, en términos literales, corriendo peligro si se dejaba alcanzar por su "cuñado".

Jungkook quedándose quieto en su lugar con una bonita sonrisa en sus belfos, observando desde la lejanía como su hermano se lanzó encima de su alfa, ambos cayendo sobre el verde pasto revolcándose peor que niños, el menor de ellos intentando escapar de las manos contrarias como diera lugar vociferando su inocencia. Y era imposible no reírse de esta cómica escena.

— Mi niño

Llamó una linda omega que recién hacía acto de presencia. Yongsun tapándose sus finos labios sorprendida al ver una linda y bien cuidada marca en el cuello de su hijo, sus ojos aguándose sin querer. Y no se necesitaba ser un haz en la materia para darse cuenta de la gran diferencia entre una marca deseada con una que jamás se deseó.

Siendo el más claro ejemplo el que ella siempre portó.

La Madre Jeon sintiéndose emotiva. No conteniendo el impulso de envolver entre sus finos brazos el cuerpo de su menor, este dejándose ser al necesitar el calor de la mujer que le dio vida, ocultando su delicado rostro en el cuello contrario donde una deteriorada marca se iba marchitando y a Jungkook se le fue imposible no sentirse sereno al darse cuenta que poco a poco esta dejaba de oler al fuerte y desagradable aroma de Hyunbin, dejando en su lugar el dulce aroma de la lavanda, aroma que hace un par de meses había desaparecido ante la tristeza de su lobo, pero nuevamente estaba resurgiendo.

Y a Jungkook se le fue imposible no dejarse inundar entre sus más profundos recuerdos, el único que portaba de su infancia en realidad, del tenue recuerdo de aquel aroma, y era simplemente gratificante ver como esta iba en mejoría en su recuperación.

— Mi dulce cachorro. Te ves divino — dio a conocer la mujer cuando ambos cuerpos se alejaron. Yongsun sintiéndose completa al ver la linda sonrisa de su hijo con un pronunciado rubor en sus esponjosas mejillas — ¿Cómo te encuentras? ¿Te trató bien?

Y el asentimiento por la parte contraria solo la hizo respirar nuevamente, estos tres días habiendo sido un total martirio de pura incertidumbre para la mujer, al por desgracia, haberse imaginado lo peor.

Eran traumas.

Traumas que debería dejar ir.

En algún momento.

— Taehyung me cuido muy bien estos días — informó Jungkook, jugando con sus palmas al sentir un tantito de vergüenza — Me consintió y cuido, además que también limpio todos los días la marca, aunque yo le decía que no era necesario. Fue muy atento

Yongsun sonriendo tranquila, acariciando con cariño la mejilla de su hijo.

— Bueno. No me podía esperar menos. Kim Ara es su madre, ella crio a un excelente alfa

Y era tan amena la charla...

Lastimosamente, esta no dejándose perdurar por mucho tiempo.

— ¡Cachorro, ayúdame! — clamó entre lloriqueos un alfa en aprietos, esto logrando que ambos omegas dejaran de lado su conversación para girar a ver el alboroto — ¡Amor, me van a matar!

Madre e hijo no sorprendiéndose cuando hallaron a Junghyun con el color turquesa en sus iris, este hundiendo el rostro de un alterado Taehyung en la fuente de agua más cercana, la cual era decoración del lugar. Algunos empleados y guardias viéndose entretenidos por la graciosa escena que estaban protagonizando ambas autoridades.

ANGEL FACE || KTH & JJKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora