En Corea, hay dos familias mafiosas que se comparten la plaza: Los Park y los Kim.
Sin embargo, con los recientes rumores de la llegada de la Yakuza japonesa, las cosas dejarán de ser tan pacíficas entre ambos clanes.
¿Qué familia tomará el mando?
Era de mañana. Un día especial, a decir verdad. Las vacaciones de verano habían terminado, y ahora había que regresar a las aulas. Para Kim Doyoung aquello significaba finalmente cursar su último año en la escuela media. Lo cual a decir verdad no significaba mucho ya que los estudiantes de todos los grados que servía el colegio solían mezclarse entre ellos en los pasillos y eventos escolares. Se creaba una mezcla bastante homogénea, especialmente porque todos llevaban el mismo uniforme: pantalón azul oscuro, camisa blanca, corbata azul para los chicos, moño para las chicas. Para el ojo no entrenado era bastante difícil el diferenciar a los estudiantes de la escuela media de los de la escuela superior, y podría decirse que los de la escuela primaria podían mezclarse del mismo modo, aunque en su caso era fácil distinguirlos más que nada por la estatura.
Justo fue eso lo que ocurrió a medio día, cuando la comunidad estudiantil en pleno salió de sus aulas, en dirección a tomar el almuerzo en la cafetería. Entre un grupo de estudiantes de tercer grado de preparatoria (tres años mayores que él), Doyoung distinguió a su primo, y se apuró a darle alcance.
-Escuché lo ocurrido la semana pasada en el centro comercial –susurró Kim Doyoung en el oído de Kim Junkyu.
Junkyu no pudo evitar fruncir el entrecejo, al tiempo que se preguntaba qué tanto era lo que había llegado a oídos de su primo. En las noticias apenas y se había mencionado un intento de robo en el centro comercial, haciendo hincapié en que no había habido heridos. Pero era obvio que Doyoung sabía el señor Kim había sufrido un disparo, pues su propio padre había llamado hacía un par de días, para desearle pronta recuperación al líder del clan Kim.
-Papá está bien –fue todo lo que Junkyu pudo responder-. Extrajeron la bala entera, y no hay daño en sus nervios. Podrá volver a caminar en menos de un mes.
Doyoung se limitó a asentir.
-¿Se sabe quiénes son los culpables?
-Papá sospecha de los Park.
Doyoung se detuvo, confundido, tratando de analizar lo que aquello podía implicar. Sin embargo, debido a que Junkyu no había detenido su paso, tuvo que correr para alcanzarlo.
-Es extraño, ¿no? –continuó Doyoung en voz baja, procurando que nadie más escuchase su conversación-. Generaciones sin ningún tipo de problema o enfrentamiento directo, y de la nada, son los Park quienes abren fuego a plena luz del día. Ah, por cierto. Hay un nuevo rumor en mi clase –dijo prontamente-. Creo que deberías decirle a tu hermanastro sea más cuidadoso al demostrar sus amistades. Ya sabes lo que se dice de él...
Junkyu sonrió por lo bajo, pero fingió no estar enterado de nada.
-Watanabe Haruto. Parecer ser varios ya han solicitado el apoyo del Informante para saber sobre su familia y el tipo de beneficios que traería hacer amistad con él. Extrañamente nadie ha encontrado nada, lo cual está produciendo la gente se inquiete, debido a que se le ha visto conversar con Bangjeon esta mañana. No sé de donde ha salido o quien lo ha iniciado, pero corren rumores de que tiene relaciones con la Yakuza. Ya sabes, la mafia japonesa. Y considerando todo parece indicar es cercano a tu medio hermano...
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