❝Se supone que a Soobin no le gusta Yeonjun...
... Aunque la persiana semiabierta de su habitación sea testigo de todo lo contrario.❞
Donde Yeonjun llega a la vida de Soobin para generarle muchas dudas, pero también se queda ahí para responder cada...
Es aquella que nace del interior de cada persona. Es una motivación puramente íntima con la que puedes conseguir retribuciones tales como: amor propio, confianza, independencia, satisfacción personal, etc.
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Soobin rio irónicamente observando el papel frente a él, inerte en su escritorio, con nada más que nueve palabras que le sabían extraño:
"Lista de cosas que me gustan sobre mí mismo…"
Y yo que creí que ya me había librado de las listas. Pensó, suspirando.
Desde que era pequeño, Soobin no se preocupaba por cosas como el autoconocimiento de uno mismo o cursilerías como sus sentimientos. El cómo le hacía sentir alguna situación, la importancia de decir en voz alta tus preocupaciones, el poder que tenía salir de su propia cabeza imaginativa y conectarse con las personas, conectarse con algo más que no fuera solo él mismo.
Con el paso del tiempo, Soobin se dio cuenta de la importancia que tenían sus sentimientos. Se dio cuenta de ciertos aspectos sobre su persona; ya sea que sus compañeros de clase hablaran de él a sus espaldas, que las personas mayores opinaran de él sin su consentimiento, o las constantes decepciones de nunca sentirse el mejor en algo, siempre quedarse a medias, siempre sintiéndose como alguien inferior, tratando a los demás con una actitud dócil por el miedo a ser rechazado. Soobin no se preocupó jamás por el hecho de sentirse como un inútil; porque muchas veces era así como se sentía…
Pero… Desde que Taehyung le animó a ir a una sesión con el psicólogo, como una forma de apoyo. Al ver cómo Soobin parecía progresar un día y al siguiente se sentía fatal, Taehyung se preocupó por conversar con alguien en su lugar de trabajo, en una modesta clínica donde su amigo hacía su pasantía; enterándose así Soobin de que Taehyung estaba a unos meses de terminar su Licenciatura en Psicología. Agradeciendo internamente a Jungkook de haberlo llevado al gimnasio aquél día, sólo por el hecho de haber tenido la suerte de conocer a alguien tan especial como Taehyung.
Sin embargo… ¿Quién dice que dos sesiones con el psicólogo te arreglan la vida?
Soobin estaba a nada de rendirse y mandar todo por la borda. Porque era… Difícil. Es difícil afrontar tu propia realidad.
Decidió dejar el papel de lado por un momento, tratando de despejarse mientras jugaba con la pajilla de su jugo de naranja sobre la mesa de la tertulia cafetería.
Recordó entonces las palabras del Doctor Changbin, tratando de concentrarse.
– Comenzarás por conocerte a ti mismo, Soobin.
Está de más decir que a Soobin le sudaban las manos en aquél momento, por lo que cada dos por tres las restregaba sobre el pantalón en sus rodillas, algo ansioso.
